La ira de los Dioses

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Vegetta llegó a su casa cuando recién comenzaba a salir el sol. Los lobos seguían a lobo plateado que los guiaba de vuelta a su sala oculta, habiendo acompañado a su amo suficientes veces como para ya estar acostumbrado a su rutina. Luego de dejar al caballo en el establo, se dirigió a su pequeño escondite a cambiarse.

Se saco el traje de lobo nocturno de forma mas lenta que la habitual, perdido en sus pensamientos mientras contemplaba cual seria la mejor forma de acceder a la casa de Mangel para recuperar el pendrive.

Se le ocurrió que quizás lo ideal seria pasarse a visitarlo esta tarde y ,con la excusa de necesitar consuelo por el exilio de Rubius y querer pasar el tiempo con el único otro amigo que le había quedado al oso, revisar la casa y el perímetro por entradas y salidas.

Con eso decidido, sale del escondite para ir a su cuarto con la intención de dormir un par de horitas. Una vez acostado en su cama ve por su gran ventanal que se están empezando a formar nubes de tormenta y sonríe. Nada mejor que dormir con lluvia.

Se despierta unas 5 horas después por culpa del sonido incesante de su celular ya que alguien lo estaba llamando. Lamentando la perdida de su sueño reparador, Vegetta se estira para agarrarlo y atender, una vez lo hace, la voz llena de pánico de Luzu es lo primero que escucha.

"¡Vegetta! ¡¿Donde estas?! ¡Todo es un caos! ¡Necesitamos ayuda!"

"Estaba durmiendo, ¿Que paso? ¿Que es un caos?" Pregunta Vegetta entre bostezos mientras se levanta.

"¡Karmaland es un caos! La tormenta fue mas grave de lo que pensamos. El agua ahogo todos los cultivos de Mangel, parecen una maldita piscina. Los vientos provocaron que cayeran encima de la casa de Fargan 5 arboles destrozando paredes,ventanas y todo lo que estuviese en su camino. Al árbol de Willy le cayo un rayo y ahora esta prendido fuego, estoy en su casa con el resto de los muchachos tratando de apagar el fuego pero es muy dificil." Explico a toda velocidad Luzu.

Mientras lo escuchaba, Vegetta estaba agarrando sus cosas para salir y tuvo que forzarse a reprimir la sonrisa que amenazaba con escaparse. 

Vaya, vaya, vaya, el Karma es una perra, aparentemente.

"Estoy saliendo para allá, pero ¿Sabes? Es curioso" Comento Vegetta en un tono ligero

"¡Apurate, por los Dioses!" Grito Luzu al celular y luego pareció alejarse del aparato para gritar " ¡Alex, necesito mas cubos de agua!"

Una pausa.

" ¿Que es curioso?" Pregunto Luzu.

"Que Rubius ayer me dijo antes de partir que me cuidara de Willy, Fargan y Mangel, que no eran de fiar," Comento Vegetta con la tranquilidad de quien discute el clima.

"¡¿Y eso que tiene que ver con esta tormenta del demonio?!" Pregunto Luzu, exasperado.

"Nada, es que me llama poderosamente la atención que si esta es una tormenta tan poderosa  que mi isla flotante este intacta." Comento Vegetta en un tono inocente

Luzu se quedo callado un segundo

"¿Intacta, dices?"

"Intacta Luzu. Es más, las plantas lucen hasta más verdes." Confirmo Vegetta. " ¿Alguna otra casa fue dañada a parte de la de estos tres?" Cuestiono.

Otra pausa.

"Huh, ahora que lo dices, no. Están todas perfectamente, incluso la mía que esta en un terreno propenso a derrumbes." Respondio Luzu, "Curioso en verdad."

"Curioso, curioso." Concordó Vegetta, "Casi parecería que el Karma o los Dioses están molestos con ellos por algo."

"Huh..."

Pausa

"¿Por casualidad, Rubius te dijo por que ellos no eran de fiar?" Cuestiono Luzu

Vegetta rió de forma forzada, un poco de veneno cubriendo sus palabras cuando respondió "Lo lamento Luzu, no quise pasar el último día con un querido amigo que jamás se me permitirá volver a ver hablando de cosas que parecían dolerle. "

Otra pausa.

"...Lo siento Vegetita" Murmuro Luzu, apenado.

"No te preocupes, conmigo no es con quien te tienes que disculpar." Dijo fingiendo un tono alegre. "Estoy en el ascensor, te veo en máximo 10 minutos en la casa de Willy" Dijo Vegetta y corto.

Una vez estuvo abajo, salio de su terreno caminando sin demasiada prisa. Caminar bajo la lluvia era agradable y la casa de Willy no estaba lejos. Además, no estaba especialmente desesperado por ir en su auxilio

Cuando llego allí contemplo como el tronco ardía de forma brillante y con fuerza, a pesar del aguacero que estaba cayéndole encima y Vegetta sonrió con un poco de humor.

"¿Un fuego que no se apaga? ¿No es un poco mucho, Dioses?" Comentó mirando al cielo, divertido. El cielo se ilumino con relámpagos y truenos que casi sonaban a risa.

Vegetta paso los próximos 20 minutos con el resto de sus compañeros, cargando baldes con agua y arrojándolos a las llamas, que para la alegría del dueño de la casa, por fin hacían efecto, apagando el fuego a una velocidad pasmosa. Una vez apagado el incendio, todos se recostaron en el pasto enfrente de los restos humeantes de la casa de Willy  a descansar. En algún momento mientras luchaban contra el fuego había dejado de llover.

"Tiooo...Mi casa..." Se lamento Willy con pesar. Fargan apoyo una mano en su hombro a modo de consuelo.

"Bueno chavalada, esto es lo que pasa cuando uno exilia a un cura." Dijo Alex a modo de chiste, pero eso solo provoco la risa de Vegetta e hizo sentir incómodo al resto.

"Vegetta, no quiero saber lo que le paso a tu casa con esta condenada tormenta. ¿Vas a necesitar ayuda para reconstruirla?" Pregunto Auron, desesperado por cambiar de tema. Vegetta solto una risita.

"Gracias por la oferta, pero no es necesario. Esta intacta." Dijo con una gran sonrisa. "Eso pasa cuando uno defiende al cura y lo acompaña en su último día." Añadio, encantado de echar leña al fuego. 

Alex se rió ante su comentario, Luzu lo miro con una mirada contemplativa, como si estuviese considerando algo y nuestros 3 queridos hermanos oscuros se quedaron de piedra ante ese comentario.

"Hablando de eso, Mangel." Llamo Vegeta

"¿Eh? ¿Que?" Pregunto el susodicho

"¿Te molestaría si hoy paso por tu casa a la tarde y nos vemos unas pelis?" Pregunto con dulzura Vegetta, su tono lo mas suave que había sido en todo el día. "Es que tengo ganas de pasar la tarde con alguien que no me mire con lastima por lo de Rubius."

Todo el grupo se quedo duro ante semejante comentario y Mangel solo sonrió suavemente.

"Claro Vegetita, pásate cuando quieras. Siempre eres bienvenido en mi casa" Contesto Mangel, su voz un poco temblorosa por la culpa que lo comía vivo.

"Gracias, Mangel." Vegetta dijo con una sonrisa "Vale, chavales, os dejo, que necesito dormir."

"¿Mas todavía? Pero Vegetta, es la una de la tarde ¿Que, hoy estas de vago?" Pregunto Fargan mientras Vegetta se levantaba y se iba caminando a paso lento

"Para nada Fargan, es solo que no dormí bien. Tuve pesadillas."

"¿Pesadillas?" Pregunto Willy preocupado. Vegetta paro de caminar y decidió echarle un poco mas de sal a las heridas de sus amigos. 

Él se giro con una mirada sombría que era acentuada por sus ojeras.

"Si, pesadillas, Willy. Pesadillas sobre como alguien muy querido para mi era despedazado por hordas interminables de monstruos en una espantosa noche sin estrellas." Dijo, su tono apagado y vacio. 

La mayoría miraba a Vegetta con expresiones de shock y lastima, Willy y Fargan estaban ocupados viendo a cualquier cosa menos a él y Vegetta podia ver como los ojos de Mangel se cuajaron de lagrimas.

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⏰ Última actualización: Apr 07, 2020 ⏰

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