Dark Age

4. Misión

Una plaza abarrotada de gente se mueve camino hacia una catedral vistosa. Un niño llora desconsolado debido a que no encuentra a su madre. De repente, una piedra gigante cae encima de la catedral rompiendo gran parte de esta. La multitud alarmada empieza a correr y a gritar desconsoladamente. El niño alza la vista y ve que una piedra gigantesca se aproxima hacia él. Cierra los ojos y deja de llorar, su vida ha llegado a su fin. Todo se vuelve negro y se escucha una voz débil  entre toda la penumbra.

-Lucatiel...

Lucatiel se despierta lleno de sudores fríos y con una mirada nerviosa. Mira a su alrededor, Clarisse duerme plácidamente junto a las llamas cálidas y este se levanta para observar el perímetro. El sol empieza a asomarse por la lejanía. Clarisse despierta algo cansada y dolorida ya que el suelo no es algo tan cómodo como un pajar. 

-Buenos días Lucatiel- mientras se estira para poder recomponerse después de la noche tranquila.

El joven no responde mientras llega con un animal grande ya despellejado y lo coloca encima del fuego. 

-¿Has dormido bien?- la muchacha algo sonriente nota su frialdad e intenta sacar un tema de conversación.

-Como el resto de días- con un tono seco saca un par de varas para mover la carne en el fuego y poder cocinarla.

Clarisse suspira ya que parece que no va a sacarle nada a su compañero. Se levanta y se coloca a su lado.

-Puedes contarme lo que te pasa.

Este al escuchar eso se pone mucho mas serio y distante.

-No me conoces de nada, siquiera se porque me buscabas.

La joven le mira y asiente. 

-¿Tenemos tiempo para que te lo pueda contar?- le observa con algo de inseguridad.

Lucatiel suspira y asiente.

-Pero no te demores demasiado, o la comida se quemará.

-Mi misión en esta vida es buscar a aquel que nos salvará de esta era, una vez lo consiga mi misión habrá terminado y podré ser libre.

-¿Libre? ¿Eres una esclava o algo así?- pregunta el joven.

-No no no, no me considero una esclava- mientras ríe- le debo la vida a aquellas personas que malgastaron su tiempo en mi. Verás, yo crecí solo con mi madre. Ella... Ella digamos que no le agradaba mucho la idea de ocuparse de una niña sola, así que cuando tenia 7 años, mientras cruzábamos un puente, ella intento tirarme por este para que ella tuviese una vida tranquila. Un grupo de soldados pasó por allí y por suerte paró y proseguimos nuestro camino hacia el siguiente pueblo. Decidí escaparme de su lado y vagué sola por el pueblo hasta que caí al suelo debido al cansancio y al hambre. Por suerte, un caballero que pasaba por ahí de casualidad me recogió del suelo y me llevó a su casa junto a su familia. Al despertar, observé la cara de un niño al que le faltaban todavía algunos dientes. Al verlo claramente me asusté, y le golpee con todas mis fuerzas. Su familia se sorprendió, no era propio de una niña tan joven actuar así. Pasaron las semanas, y empecé a vivir con ellos. Yo no comprendía muchas cosas ya que, bueno... ¿Familia? Desconocía su significado, aun hoy día no lo comprendo del todo. 

Lucatiel se sorprende al escuchar eso mientras ella mira el fuego.

-Empecé a aprender milagros y varios rezos para ayudar a mi "hermano". Él quería ser un caballero para poder protegerme de los peligros que habitaban en el exterior. Ambos conseguimos nuestro propósito.

-Tu hermano era Oscar, ¿no es así?

Clarisse asiente- Él siempre velaba por mi, hasta por las noches frías fuera de casa. La guerra acabó con el pueblo desolado y Oscar y yo salimos ilesos de milagro. Sus padres, bueno... Al final llegamos al pueblo colindante y nos hospedamos ahí varios años junto a otros huérfanos. Nos enteramos de la historia de un héroe que salvaría el mundo de esta catástrofe que se esta viviendo, de esta era oscura.   

-Clarisse yo... No soy ningún héroe, apenas soy alguien en la vida como para salvar a millones de personas.

Clarisse sonríe- Solo quiero que el sacrificio de Oscar no haya sido en vano, y no quiero volver con las manos vacías otra vez.

Lucatiel se levanta y acto seguido recibe una flecha en el hombro derecho. Cae al suelo debido al golpe y Clarisse corre a ayudarlo.