ACLARACIONES:
•Usaré ciertos modismos de Cuba.Me disculpó si no llegó a responder algún mensaje, lo más seguro es que ya esté dispuesta a irme de Wattpad, y una vez más, quisiera disculparme si la calidad de los capítulos llego a bajar. La verdad es que no me he estado sintiendo tan bien y sinceramente quería hacerlo mejor, como La suele ser, pero me sentía un poco deprimida, espero puedan entender y disfruten.
Hace algunos días que no lo veía. El día que llegó lo sentí bastante raro: era bastante agresivos con las personas de la calle, y conmigo... conmigo solo actuaba como sí sé sintiera cansado, como si no hubiera dormido en el tiempo que se fue. Lo primero que habría pensado es que aquel descarao (1) quien en ningún momento se había dignado a aparecerse por aquí, ni siquiera se había tomado la molestia de llamarme, o contestar mis llamadas y solo se paraba en frente mío, a 5 centímetros alejado y lo primero que hace es tomar mi mano cariñosamente, aquel sin vergüenza que sin embargo me tiene hasta hoy embullada (2), flechada. México vestía una camisa bien planchada: que hacía lucir su prodigiosa robustez y fuerza de su tórax, pantalones largos que ni siquiera dejaban ver al menos un poco de su piel, zapatos bien lustrados de un color negro y un largo abrigo negro que ni estaba abrochado.
Cubrió de forma muy minuciosa tanto sus alas como su cabello, o séase que sigue queriendo pasar desapercibido por ahora, cubriéndoselo con un hijab y un sombrero y como si fuera la cosa más común del mundo, encendió un bate (3) y lo mantuvo en sus labios. Otra sensación que de inmediato siento, son sus manos sobre mis hombros, esta sensación en especial me provoca cierta tranquilidad, que va acompañada especialmente con una piel de gallina.
—Me alegra verte y saber que estás bien.— susurró. De repente, se aleja con caché (4) y con una forma de caminar que me es ajena, o en otras palabras, caminaba raro más solo se llega a alejar diez centímetros para tomar mi mano de una buena manera; hasta en cierto punto parece estar encañado (5), borracho. De inmediato, estira su rostro de tal manera que se dibuja una sonrisa espontánea y reservada, pero honesta. Esta sonrisa igual me resulta ajena, pero el cariño y honestidad que se reflejan me dice que todo lo que está haciendo, lo hace por este cariño que probablemente me tenga. Lo que me resulta más extraño es que actúe de esta forma tan positiva.
¿Por qué se me hace extraño?
Bueno...—¡México!
Retomando el punto de que lo vi un poco violento con los demás, hacía un rato que unas mujeres tanto reporteras como aduladoras comenzaron a perseguirlo desde el aeropuerto internacional de la Habana; halagando y gritando a todo pulmón su nombre, jalándolo de la chaqueta y besando extrañamente su tórax. —¡Que mango (6) eres, México!— Solo bajó su rostro y se susurró a sí mismo, tal vez maldiciéndose y por qué se encontraba exactamente allí. —¿Qué dices? ¡Él es un guanjo (7)— respondió una de las reporteras ante el comentario de la otra mujer.
—¡Eso es mentira! ¡Él es todo un... un... Adonis!, ¡mira su cara bien marcada!
—Y... también...— aquella mujer que continuaba adulándolo tomó de su antebrazo y siguió hablando: —Se ve más fornido, señor México.— el ya mencionado frunció el ceño, mostró su desagrado en todas y simplemente les gritó: —¡Ya cállense todas!— apartando a la mujer que lo adulaba, evitando cualquier contacto con ella, en especial todo su brazo y manos, ya que las considera como una cosa magnífica, no sé por qué, y lanzando una mirada asesina a todas las que lo seguían. —¡De verdad son una molestia!, ¡Piérdanse, zorras!— Las mujeres gritaron de felicidad (sí que son zorras...) y al final huyeron todas juntas, menos una reportera.

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Lascivia.
Misterio / SuspensoHistoria countryhumans, cancelado. ADVERTENCIA: ⚠️ •Cancelado, con 5 capítulos más a estrenar. •Lenguaje inapropiado. •Capítulos de más de 1000 palabras.