Mi Niñero Pervertido [YOONMIN]

Capítulo 18: Imposible resistirme

-- ¿Y-yoongi?--.

-- Lo siento Jimin, pero ya no puedo aguantar más--. la bata que antes cubría al menor ahora se encontraba en las manos del más alto que apretaba con fuerza su mandíbula.

-- ¿De q-que está hablando?--.

-- Simplemente hermoso--. el azabache observaba sin pudor todo el pequeño cuerpo del menor--. Acabas de de cavar tu propia tumba.

--¿A-ah?--. el ahora rubio estaba más que confundido por las palabras del mayor. Ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar cuando en un veloz movimiento fue cargado como costal de papas sobre el hombro del contrario, recibiendo un fuerte nalgada que hizo que soltará un quejido y sus mejillas se tomarán de un bello rosa--. ¿¡Qué estás haciendo!? ¡Bajamé!--.

-- Nop--. A paso tranquilo, Min se dirigió a su habitación en la casa del menor, mientras recibía pequeños golpes en su espalda, que no le generaban dolor alguno ya que Park estaba tan avergonzado que perdía fuerza. Al llegar, abrió la puerta de una patada, adentrándose en el lugar.

-- ¡Ba-ja-mé!--. Seguía protestando el de mejillas regordetas y coloridas.

-- ¿Seguro?--. preguntó, observando las medias en las  bien formadas piernas del menor con lujuria.

-- ¡Si-í!--.

-- Como quieras...-- atacando las órdenes del menor. Rápidamente lo tumbó en la cama boca arriba sin cuidado. Haciendo que por inercia, la falda del menor se levantará un poco mostrando mucho más de lo debido y con eso me refiero a las tiernas bragas con diseño de pollito que llevaba el rubio.

Y como si algo se rompiera dentro de Yoongi(su cordura), se abalanzó sobre el contrario y empezó a atacar esos gruesos labios que tanto le encantaban.

Mordió su labio inferior, robandole un dulce gemido aprovechando para meter su lengua explotando toda la cavidad bucal del rubio.

Jimin como podía correspondía al  beso, se estaba dejando hacer por el mayor y eso le hacía sentir bien. Los fríos y largos de dedos de Min hacían un recorrido de arriba a abajo por sus hermosas piernas cubiertas por aquellas lindas medias.

-- ¡Ah!-- el azabache atacó el cuello del menor dejando marcas a su paso. Metía su mano debajo de la camisa del contrario levantándola y con su mano estimulando uno de los botones del rubio.-- ¡A-ah~! Mmmmh

-- Tan lindo...--. susurró aún estando en el cuello del menor, causando un escalofrío al contrario, para después continuar con besos hambrientos llegando así a sus clavículas dando un leve mordisco.

-- Mhmm-- mordía fuertemente su labio causando que estos se volvieran más rojos y tomarán un hermoso brillo. Sus pequeñas manitas se mantenían aferradas a las sábanas conteniendóse.

-- ¿Por qué tan tímido?-- preguntó levantando ligeramente su rodilla tocando el miembro de Jimin por encima de la tela.

-- ¡No me mires!--. posó sus manos en su cara tratando de cubrirlas, pero unas manos pálidas lo tomaron de las muñecas  dejando estás por encima de su cabeza.