CASUALIDAD

Capitulo 10| un beso y un viaje

Termino el café y le doy un beso a Emily en la mejilla. Llegó al trabajo y subo inmediatamente, saludo a las chicas y tomó asiento frente a la mesa de cristal al lado de la puerta de Matthew. Matthew, tocó mis labios al recordar el beso que nos dimos en nuestra cita

Sonrió y me dispongo a organizar y elaborar la agenda del jefe

— Buenos días, Eli —levantó la vista al oír su vos, sonrió y le respondo

— Buenos Días Matt

Me da una sonrisa y se dirige a su oficina. Suspiro y sigo organizando todo

— Eli, ven a mi despacho por favor

El sonido del teléfono me sobresalta y rápidamente me dirijo a su oficina

— ¿Si?

— Toma asiento por favor.

Hago lo que me pide y tomo asiento al frente de su escritorio

— Pasado mañana tendremos un viaje de negocios

— ¿Tendremos? —le mire confundida, a los viajes de negocios no siempre va la secretaría

— Si —sonrió— vendrás conmigo, iremos a República Dominicana.

— Oh

No supe que más decir, estaba un poco nerviosa, viajaremos, él y yo

— Si no necesita algo más, me retiro —me levanto y me dirijo a la puerta, ya apunto de abrirla siento unos fuertes brazos rodeándome la cintura.

— Estás hermosa —susurró con vos ronca mientras me abrazaba con mas fuerza. La piel se me erizo al escuchar sus palabras, podía sentir su respiración en mi odio, lo que causaba que mis piernas se convirtieran en gelatina

— Matt, esto está mal —logre decir —, tú eres mi jefe y ...

Me volteo y sin darme tiempo a decir nada más, me beso. Sus labios junto a los míos se movían de forma delicada, tenia una mano en mi trasero y la otra en mi cara, acunando mi mejilla. El beso se fue tornando más salvaje, nuestras respiraciones más pesada y el aire más caliente

Dos toques en la puerta nos hicieron sobresaltar, con la respiración acelerada  me alejé lo más rápido de él

— ¿Quien? —respondió con la vos agitada

— Ricky

— Eh... me retiro — digo con mis mejillas sonrojadas

— Espera —me pega a su pecho y me da un rápido beso en lo labios

Matthew

Me siento en mi escritorio mientras veo cómo Ricky mira a Elisa

— ¡Hermano!, tremenda secretaria. Estoy pensando en trabajar en una oficina —dice dándome un abrazo

—No seas payaso Rick y cuantame que te trae por aquí

— Acaso no puedo visitar a mi querido hermano

Lo miro y ruedo lo ojos, cuando Ricky viene con esa emoción algo se trae

— Está bien me descubriste, resulta que termine con Marta —Dice sentándose en una de las sillas y subiendo los pies en la mesa

— Baja las patas de mi mesa y cuéntame el por qué

— Ya, señor rudo. Resulta que la encontré besuqueándose con, cómo se llama el tipo ese... ah Adam

— ¿Con Adam? ¿Y ese no era su ex novio?

— y si, pero parece que se arrepintió de haberle dejado y ya vez —dice encogiéndose de hombros