Hola mai frien ;) (lo sé mi inglés es moderno)
Me levante a la hora de siempre, me vestí y arranque de camino al trabajo.
Cuando llegué todo estaba muy calmado, siempre me gustaba llegar cinco minutos antes, así podría arreglar algunas cosas antes de que llegara la jefa, que en este caso es el jefe.
Entro al interior, todo se encuentran callado. Miro hacia atrás fijándome el nombre de la empresa por si me había confundido, pero no sigo de pie en la empresa Said. Le restó importancia y voy a mi puesto, dejo todo y entro a la oficina de el señor Said a organizar todo antes de que llegue.
Estoy acomodando unos papeles cuando una notificación llega, frunzo el ceño, nadie me escribe a estas hora. Y Emily no es por que se levanta a las 10. Con curiosidad habrá la mensajería
El chico sexy de la playa: Buenos días princesita
Había olvidado que se puso ese nombre en mi celular. Luego lo cambio
Una sonrisa se forma en mi rostro, no se por qué pero este chico es muy chistoso, no me conoce y me dice princesita ¿Que le pasa?
Escucho un carraspeo y volteo hacia la entrada de la oficina, mi corazón se acelera un poquito al darme cuenta de quien está hay:
Matthew
Lleva puesto un saco y debajo de este una camisa blanca.
Guardo el teléfono y susurro un "Disculpa" a lo que el respondió con un asentimiento de cabeza
—Buenos días señor Said —saludo terminando de acomodar los papeles— ya deje todo listo
—Buenos días señorita García — me sonrió—, gracias, podría traerme un café. Suelo empezar mi día con uno
Nota mental: traerle café todos los días
—Por supuesto
Salí de la oficina y me dirigí a la pequeña máquina de cafés a un lado en la recepción. Aprovecho y le respondo el mensaje a Elliot, cuando la maquina suelta un pitido; indicando que e café estaba listo, la apago y tomo el café.
Llevo el café, y prosigo a hacer mi trabajo. Ya para el final del día, todos se habían ido, no se por qué pero siempre era la última en irme
—Señor Said, ¿se le ofrece algo más antes de irme? — pregunte a Matthew, que está sentado detrás de su oficina con la corbata desarreglada y dos botones de la camisa suelto
Se ve tan sexy
—Si, acércate por favor —me acerque— Mira esta carpeta, la estoy estudiando desde hace unos minutos y me eh dado cuenta de qué hay algunos errores —me muestra una carpeta en la computadora
Frunzo el ceño, que yo recuerde todas las carpetas estaban en orden
— Que extraño, antes de la señora irse organizamos todo y no dejamos nada sin terminar —me acerque más a la computadora tratando de ver bien la carpeta, era extraña nunca la había visto— no la eh visto, pero pregúntele a la señora clara, quizás ella le dé información
— Gracias, eso era todo
Me dirigí hacia la puerta para irme, pero su vos me detuvo
— ¿Tienes en que irte? —preguntó
— No, me iré en auto bus, mi casa no está tan lejos...
— Te llevaré —me interrumpe con vos demandante
Intente decir algo más pero no me dejo así que en este momento nos encontramos rumbo a su carro
Nunca me a incomodado los carros, al contrario me encantas los carros nos hacen la vida más fácil. Lo incomodo en este momento es que estoy en el carro de mi jefe, Con mi Jefe
CON MI JEFE!!!!
Había un silencio diríamos...cómodo. Si, cómodo hasta que Matthew lo interrumpió
—Entonces señorita García, ¿Le gustan muchas las fiestas? Ah
Sabía de donde venía su pregunta.
—No, ese día decidí ir después de mucho tiempo... pero no no me agrandan mucho las fiestas
— Que mal —me mira de reojo— Me gustan las fiestas
Dijo embozando una sonrisa, como no dije nada más agregó
— Pero no soy uno de esos tipos que se ponen hasta la madre en las fiestas y termina llamando a su ex
Solté una risa, es muy divertido a pesar de su aspecto autoritario cuando está en la empresa
Pasamos unas calles más y ya estaba en mi casa
***
El sonido del teléfono me distrae y voy a la sala a cogerlo
—¿Bueno?
—Ehh...hola! Soy Matthew —suelta una risita
—Ok —me siento en el mueble que queda al lado. Por que ahora estoy en un estado de: WTF, suena nervioso
Suena puramente nervioso :0
—Solo te llamaba para saber cómo estabas
—Estoy muy bien Gracias, y usted Señor Said ¿Cómo está? —agrego en un tono de diversión y confusión
—Muy bien. Me alegro de que estés bien...digo es lindo que estés bien, ya sabes es lindo que las personas estén bien bien es bu...
—Creo que ya entendí —solté una risa— ¿A que se debe su llamada señor Said?
— En primera, no me llame "Señor Said" me hace sentirme como un viejo y recuerde que no estamos en el trabajo, es Sábado —Asentí de manera estupida como si él estuviera viéndome—. Y en segunda ¿le apetecerá tomar una taza de café conmigo?
Hasta dos bombón
— Con una condición —hice una pequeña pausa y le oigo decir: hay sabía que era una mala idea, por lo que me reí un poco— Tampoco me llame "Usted" me hace sentir vieja y no lo soy
—Me eh dado cuenta
—¿Que?
Y colgó
¿Quien los entiende?
Voy a darme una ducha y alistarme para ir a tomar el café con Matthew
Al salir del baño reviso mi celular y encuentro un mensaje
Sexy Jefe: te pasaré a buscar a tu casa ;)
Yo: Bien :)
Me visto con algo sencillo, dejo mi cabello suelto y bajo. Oigo la bocina de un carro y se que es el así que salgo de la casa con mi bolsa en mano.
Llegamos al café, nos sentamos en una mesa a un lado de una gran ventana y pedimos dos cafés y pastel de chocolate
Mi favorito por cierto
Matthew no dice nada y solo se dedica a mirarme, me remuevo un poco de la silla y lo miro
— ¿Qué tengo en la cara? —pregunto tocándome el rostro
Acerca su mano a mi mejilla y me paralizo. Siento su tacto por la comisura de mi labio, luego un suave masaje en círculos. Mis ojos nunca dejan los suyos
Quita su mano con mucha delicadeza
— Tenías pastel en la comisura del labio —me da una sonrisa— También tienes unos ojos muy lindos.
Hola.
Se que me eh tardado más de lo normal en escribir un nuevo capítulo, pero quería hacerlo perfecto
Besos
Nos leemos luego ;)
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CASUALIDAD
TeenfikceLa misma hora el mismo lugar... casualidad, nada más y nada menos que casualidad. ¿Él era para mi y yo era para el? Tal ves si, tal vez no... Elisa se encontrará al amor de su vida casualmente. Este será su nuevo jefe y el amor de su vida. ¿Podrá E...