La mujer que se llama Jane me llevo con ella a un lugar lejano de la ciudad, ese lugar es deplorable como alguien puede vivir aquí. Ella me llevo con ella adentro de una casa que parecía que se iba a caer en cualquier momento, todas estas personas parecen felices de vivir aquí.
Me llevo al último piso del edificio y tocó la puerta, la puerta fue abierta y un Forth muy flaco y pálido se dio a conocer. Mi Forth ya no es el Forth que conocí hace quince años uno fuerte, musculoso, mirada aguda, lleno de energía, muy sano. Ahora era un hombre que se miraba débil, flaco, pálido, ojos tristes y demacrado, sin esa mirada coqueta y sin esa energía que transmitía cuando lo conocías.
- Jane, ¿qué haces aquí? No me interesa verte - Escuché la voz débil que quiso gritar a la mujer que estaba enfrente de él, pero no pudo.
Esa es la voz que extraño, pero no era débil la última vez que la escuché.
- Te traje a alguien - Jane agarró mi mano y me llevo enfrente de Forth, nuestros ojos se encontraron y lágrimas empezaron a salir.- Beam…. mi Beam - Forth se lanzó hacia mí y me abrazo lo más fuerte que pudo y pude notar que ya no tenía tanta fuerza como antes. - Has vuelto - Dijo entre lágrimas y fue imposible para mí no empezar a llorar.
- He vuelto por ti.... hay que ir a casa - Dije acariciando sus mejillas y secando sus lágrimas. Lo llevaré conmigo no puedo permitir que siga viviendo en este lugar que es tan deplorable... No puede vivir en este lugar.
- Pero,.... no tengo otro lugar... sólo este... No tengo a nadie y no tengo nada - Dijo en un susurró con su voz débil.
- Ahora me tiene a mí y tienes mi casa que será tu nuevo hogar... hay que empacar tus cosas e ir a casa - él sonrió y asintió feliz. Solo era una caja lo que tenía y la mayoría sólo eran fotografías de los dos, no tenía ropa o algo más como zapatos o algo de valor.
Lo lleve conmigo a casa y no dejo de sonreír por todo el camino al parecer estaba muy feliz. Llegamos a casa y le di una habitación para que pudiera dormir, lo dejé en la habitación para que durmiera y yo me fui a mi habitación, hice la cita con el médico para mañana... quiero que empiece el tratamiento lo más pronto posible.
Esa noche no pude dormir, me levanté a media noche y fui a la habitación donde estaba Forth. Entre a la habitación porque pensé que estaba dormido, pero no aún estaba despierto y con lágrimas en los ojos.
Me acerqué a él y lo abracé fuerte. Nos acostamos juntos y empezamos a dormir abrazados, ese día fue uno donde pude dormir más cómodo y cálido ese cuerpo aún me da la calidez que extrañaba.
Por la mañana fuimos al doctor le realizaron los estudios y el doctor dijo que Forth podía empezar el tratamiento mañana mismo si así lo deseábamos. Así que Forth empezará mañana.
Durante cinco meses ha estado en tratamiento, terapias y medicamentos. Todos estamos pendientes de él inclusive su padre y Jane.
Hoy estoy en la cafetería para verme con Dara hace mucho tiempo que no nos vemos, desde que Forth está conmigo y tengo que acompañarlo a su tratamiento.
- Al fin te dejo salir tu hombre? - Dara llegó con una sonrisa muy brillante - ¿Esta bien? - Dara es otra persona que me ha estado ayudando con Forth, siempre está al pendiente de él y su enfermedad.
- Sí, mejora cada día el doctor dice que si sigue así pronto estará en una categoría de menos riesgo. - Dije feliz de saber que Forth evoluciona satisfactoriamente en sus terapias.
- Me alegro por él y por ti, sé que si le pasa algo malo tú morirás por la tristeza - Me reí ante lo que dice Dara y tiene razón como voy a seguir sin Forth he vivido quince años lejos de él y lo único que me mantuvo vivo es la esperanza de que algún día volveríamos a estar juntos.
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Dolor
Short StoryMientras camino por la calle me vuelven a invadir los recuerdos, Ya han pasado cinco años, pero las imágenes se mantienen frescas en mi memoria. Y mientras camino por esta calle oscura me vuelvo a preguntar si lo que hice fue lo correcto.