•Ｄｕｐｌａ Ｍｏｒｔａｌ

•Cap12•

Subimos a una convi de color blanco con una gran estampa de una supuesta empresa de electricidad

Al entrar en la parte trasera estaban otros tres agentes que se encargarían de vigilar todo

— nosotros te cuidamos la espalda.

Aseguró Mike intentando hacer que me sintiera segura

— Sisi como sea

Acomode mi cabello que estaba suelto. No me agradaba la idea de meterme en la casa de un narcotraficante sin siquiera tener un arma pero con mi vestimenta no podría esconder una ni aunque quisiera

Fue un viaje algo largo pero lo peor eran los nervios que sentía en ese momento

Frenamos a unas casas de distancia de la gran mansión de el supuesto "Louis" Nisiquiera podía entender como habían podido localizarlo

— Suerte niña

Dijo Mike una vez baje de la camioneta

— te estamos cuidando

Asenti y el cerro las puertas de la camioneta

Solté un gran suspiro y empece a caminar hacia la respectiva casa. Al llegar toque el timbre de había a un lado de las grandes puertas de madera

Se me hizo raro que no hubiera guardias delante de la puerta o al menos hubiera más seguridad al rededor

— hola, en que puedo ayudarla?

Pregunto un hombre de cabello castaño claro, ojos verdes y bastante alto

—ola Sou anitta lombardo e precisaria de ajuda

*Hola, soy anitta lombardo y estaría necesitando ayuda*

— Aquí no podemos ayudarte en nada

Aquel iba a cerrar la puerta pero otro hombre le murmuro bajo que el se encargaba

— En que puedo ayudarte linda?

Sonrió.

— Creo que me extravíe y ya está oscureciendo, me genera algo de miedo y quería saber si podían ayudarme a llegar a mi destino o si podría esperar un Uber aquí

Sonreí notando como aquel no sacaba la vista de mi pronunciado escote

— Pasá, no sería capaz de dejar una bella mujer como tu allí afuera— se hizo a un lado dejándome pasar

+Bien hecho! Sigue así niña
-Habló Mike por el micrófono

— muito obrigado! Realmente se lo agradezco — sonreí dando pequeños saltitos — oh! No me e presentado, soy anitta — lo mire esperando que el se presentará

— Soy Louis, Louis Reynolds — me sonrió. Estoy con el chico indicado — tienes muy linda sonrisa — me halago

— Gracias.. suelen decírmelo— observe la casa mientras caminavamos hacia la sala de estar — tiene muy linda casa — lo mire

— Oh simplemente es la mansión de mi madre — le resto importancia — no es la gran cosa — se sentó bastante cerca mío

— Podría utilizar su baño? — pregunte rápidamente pero sin sonar sospechosa

— Claro.. Sube las primeras escaleras, en el pasillo a la izquierda, la última puerta — sonrió

Me levante con cuidando para acomodar mi vestido y empece a caminar hacia las escaleras

+intenta encontrar algo sospechoso
-volvió a hablarme Mike

— Esta no es su casa Mike, dudo que encuentre algo

Dije mientras miraba todo lo que se encontraba a mi paso

+pues averigua donde vive!
-dijo con obviedad

— Pides mucho querido compañero

Abri la primera puerta encontrándome con una simple lavandería, la segunda tenía un cuarto vacío, la tercera y última tenía el baño tal y como aquel lo había dicho

Debía volver a bajar para no levantar sospechas, acomode mi cabello nuevamente y volví a dar la vuelta para volver

Me quedé parada sin bajar las escaleras observando como Louis se encontraba hablando con el mismísimo marco

Debi esperar asta aquel desapareciera por la otra puerta para bajar

— Te tardaste— me observo

— note que hablabas con alguien y no quise interrumpir — sonreí para volver a sentarme

— oh! Marco, no es alguien importante no te preocupes —me sonrió para acto seguido pasar un mechón de mi cabello tras mi oreja

— Seguro? No quiero interrumpir nada, tal vez estabas ocupado — hable con cierta inocencia, fingida claramente — puedo irme, si quieres.

— marco solo me vino a avisar de una camioneta de la cual sospechaba pero simplemente es una camioneta de electricidad — le resto importancia al tema — puedes quedarte todo lo que quieras — su mirada bajo a mis labios

— No crees que a tu madre le moleste? Podríamos.. No se, ir a tu casa — acaricie su mejilla intentando convencerlo

— Mi casa? — subió una de sus cejas — yo creo que aquí estamos bien — acarició mi pierna

— no creo.. Me hace sentir algo incómoda — quité con cuidado su mano de mis piernas — en Brasil no somos así.. — murmure leve

— Bien, vayamos a mi casa — dejó un beso en mi mejilla para levantarse

— gracias.. — susurre mordiendome mi labio inferior