V

1.3K 121 14
                                    

Taehyung tenía un espejo en los iris azules, la claridad que tenían para expresar por sí solos era tanta que la contradicción que tenía justo ahora le dieron alas al azabache para llevárselo sin esperar respuesta.

La mano de Jungkook sosteniendo su brazo se sentía bien, terriblemente bien y eso sólo le regresaba las ganas de romper en llanto, los sentimientos estaban a flor de piel y hablar con él ahora no tenía posibilidades de terminar bien.

—Jungkook — Había extrañado tanto escucharlo, había anhelado que lo llamara sin enojo de por medio. Su nombre en los labios del rubio siempre habían sido una gran bomba contra su decisión, pues Taehyung sólo tenía que llamarlo con la dulzura que su voz tenía para convencerlo en sus peticiones. Pero esta vez aunque había mucho que analizar, no se dio tiempo y lo jalo llevándose al chico a un lugar más privado.

Entre los salones había un aula que JungKook descubrió entre sus salidas tardes de la escuela, era una que aunque tenía algunos pupitres, era bastante notorio que llevaba bastante tiempo sin ocuparse, así se volvió el lugar favorito del azabache para analizar sus sentimientos.

Una vez entraron Taehyung reaccionó y trató de ponerse de nuevo a la defensiva zafandose de su mano.

—¿Porqué me trajiste aquí? — el rubio tenía todo acumulado en su mente y su corazón no dejaba de torturarlo con aquellos sentimientos que volvieron a renacer de las cenizas.

—Tae, por favor yo... necesito decirte

—¿Ahora realmente quieres hablar? — Empezó a reírse bastante sarcástico y el enojo burbujeando calentó sus palabras.—Creo que es bastante tarde

—En serio

—No, Jungkook no, toda nuestra relación fue una maldita farsa —Respiro, organizando sus ideas.

—Necesito que me escuches, yo quiero ser sincero contigo

—Bastante después, ¿O acaso  olvidaste? ¿Sincero? Yo nunca lo note porque estaba muy ocupado en mi nube de amor, pero todo se cayó cuando te fuiste

Jungkook escogió un mal momento para hablar, ninguno estaba en condiciones aún para liberarse de los filtros y aún había palabras que decir, heridas que sanar.

—Nunca fuiste sincero, ni siquiera se si fuiste sincero contigo mismo —Terminó susurrando dolido, había pensando tantas veces si cuando profesaba su amor por él como sólo él podía hacerlo suspirar, había sido porque realmente quería mostrarselo.

—Por supuesto que lo fui —Habló, sacudiendo su cabeza desesperado por perder toda la valentía que tenía al llegar. —Nunca dudes del amor que tuve

Taehyung sonrió lleno de amargura y decepción por si mismo, lo que lloro, lo que tanto batallo por hacer, quedó atrás. Su estabilidad hecha pedazos una vez más por culpa de su ex-novio que no aprendía, que no entendía que su precencia había tambaleado su progreso y sólo lo necesitaba lejos, pues el mismo dudaba de su fuerza para alejarse nuevamente.

—Y que aún tengo por ti, jamás mentí, tú me gustaste desde que empecé a verte más seguido y no podré borrarte de mi corazón por más que lo intente

Lamentó su cobardía, se sintió fatal, pues las palabras del rubio en parte tenían razón, nunca fue totalmente sincero, pero realmente siempre tubo la boca cerrada o pagaría muy caro por andar de bocanaza.

—Tae

—Nunca aprendiste lo que era una relación ¿No? Una relación es confianza Jungkook y tú te la viviste bajo una capa cuando estabas conmigo, nunca me mostraste tú vida, cuando yo si te contaba absolutamente todo — una solitaria lágrima bajo por su rostro. —Yo también te ame muchísimo Jungkook pero creo que es bastante tarde

<<Pretty love>> °KookV°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora