El Heredero Oscuro

Capítulo 3 - La Chica de Ojos Dorados

ADVERTENCIA

Las escenas o imágenes, descritas y utilizadas en esta historia, pueden poseer un contenido altamente violento y obsceno que pueden dañar la sensibilidad del espectador. Esta historia puede contener situaciones de asesinatos, torturas, violaciones, agresiones intensas y lenguaje violento... LEA BAJO SU PROPIA SEGURIDAD

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-¡Izu-Nii! ¡Izu-Nii!- Mientras esperaba en la parada de autobús, una chica de cabello largo blanco, corría hacia mí con una sonrisa mientras saludaba. La chica usaba una camiseta larga de blanco de mangas largas que cubrían sus manos, la parte superior colgaba de un hombro mientras dejaba a la vista el otro, tenía escrita en negro la palabra "BAD"; Usaba unos shorts de jean que eran casi cubiertos por la larga camisa, medias largas de color negro, unas zapatillas de caña alta de color rojo y un pequeño bolso de color negro con detalles dorados

Ella es mi hermanita, Eri Midoriya, hace dos años que ella comenzó a llamarse con mi apellido ya que deseaba uno y decidió usar el mío para "Reforzar nuestros lazos de hermanos". Gracias a ella me encontrada sentado esperando el autobús

-Lamento la tardanza- Dijo con una sonrisa mientras se sentaba a mi lado

-¿Me puedes decir por qué me has hecho espera 5 minutos en la parada, en lugar de salir juntos del bar?- Al decir eso, ella hizo un puchero mientras me pellizcó el brazo

-Se supone que debes decir "Acabo de llegar" y luego elogiarme por mi belleza- dijo manteniendo el puchero

-No entiendo por qué deberiaAAAAAAY- Ella volvió a pellizcarme –¡Te ves muy linda, Eri!-

-¡Muchas gracias, Izu-nii!- Dijo con una sonrisa mientras me soltaba –Tu también te ves bien- Dijo mientras cruzaba sus piernas en el asiento

Antes de salir del bar, ella me dijo que no podía salir usando un traje como siempre hacia, así que tuve que abrir mi armario de ropa simple, una camiseta verde con una camisa negra, pantalones vaqueros de color azul, zapatillas rojas y un collar con un diente de tiburón... Creo... Es un regalo que Twice me dio en mi último cumpleaños

-Así hasta pareces un adolescente normal- Dijo mientras apoyaba su cabeza en mi hombro

-¿Eso es un insulto?- Dije haciendo una cara de confusión

-No, pero a veces es bueno actuar de acuerdo a nuestra edad- Dijo mientras cerraba los ojos con tranquilidad

-Lo dice la chica que hace dos días hizo un berrinche cuando se enteró de que Twice se comió su pudin-

-Cállate- Dijo con ligera molestia

En eso que ambos charlábamos el autobús llegó y ambos subimos para poder ir al centro comercial, el bus estaba casi vacío así que nos sentamos juntos para que ella vuelva a colocar su cabeza en mi hombro, en cuestión de minutos llegamos al centro comercial. Tal como esperábamos el lugar estaba repleto

-Sí que hay gente aquí- Dije mientras veía a mi alrededor

-Es normal- Dijo Eri mientras me abrazaba del brazo –Muchos salen con sus amigos, familias... Parejas- Dijo mientras su rostro se sonrojaba un poco

-Realmente pareciera que no pertenecemos a este mundo- Dije mientras veía a un niño caminando de la mano de sus padres, mi ceño se frunció por inercia... Mire a Eri y ella tenía una sonrisa mientras veía mi brazo, sonreí al verla -¿Vamos? ¿Dónde quieres ir primero?- Dije mientras ella sacaba una lista sin soltar mi brazo -¡Al cine!- Dijo emocionada mientras señalaba el camino