Sobrevivientes 2020.

CAPÍTULO 2

Una semana.

Había pasado una semana desde que los hermanos Durán llegaron al centro y aún seguían siendo el centro de atención.

Pero la mirada de todos ahora, no estaba sobre ellos y justo ahora ni siquiera eran tan importantes como la persona situada frente a ellos.

El cabello del hombre era de un color negro, sus ojos oscuros y rasgados, sus cejas no tan pobladas, su mandíbula marcada, su metro ochenta, y su robusto cuerpo, era algo que me aterraba en estos momentos.

Por su parte, los hermanos Durán, conservaban esa diversión en sus rostros, ni siquiera se inmutúaban por él.

King, había llegado al centro de Corea tan pronto pudo, Fabián había exhibido su cuerpo con tatuajes, eso no estaba bien, además, ¿cómo consiguió esos tatuajes?, eso no estaba bien visto por nadie, estaba casi segura de que no había nadie que se atreviera a hacer uno hoy en día.

Alejandra había montado todo un espectáculo, se había montado sobre el regazo de Jefferson, mientras acariciaba su oscura piel, eso delante de todos en la clase de religión, parecía como si esa clase fuera el lugar perfecto para molestar a los demás.

Quizás así era.

— Un gusto conocerlos, al fin. — Les dijo King, su voz era tan grave que hasta daba miedo.

Fabián sonrió de lado, levantó su rostro a la altura de la de King y habló mirándole a los ojos.

— Ese era tu objetivo al traernos aquí, solo lo has cumplido.

Frunci el ceño, pude notar la confusión de Lía también, al igual que la de Dalilah y Max.

— Kira, Tyler, vengan conmigo. — Nos ordenó King. — Ustedes también.

Ambos nos levantamos, Alejandra y Fabián también lo siguieron a su oficina, ni un sólo segundo esos dos quitaron la diversión de sus caras.

¿Cómo podían ser así?

King abrió la puerta y miró a Tyler, luego de mí.

— Ustedes esperen aquí.

Dicho eso, hizo un ademán para que Fabián y Alejandra pasaran.

Me resbalé por la pared hasta tocar el suelo y sentarme en él con las piernas extendidas. Por su parte, Tyler se puso frente a mí, pero aún seguía de pie.

— ¿Qué crees que les pasa? — Le cuestioné mirándolo.

El bajó su vista hasta mis ojos, su semblante era totalmente serio, un mechón de cabello caía sobre su frente, como la mayoría del tiempo.

— No lo sé, me imagino que solo quieren llamar la atención. — Se encogió de hombros y asentí sin decir más. — Aunque, quizás también se traen algo entre manos.

—¿Algo como qué?

—La manera en la que nos miran, en como contestan a King, la forma en que se empeñan en hacernos sentir inferiores a ellos, no es normal Kira, piénsalo, ellos saben algo que nosotros no.

— Estás alucinando, ¿qué podrían saber ellos que nosotros no?

Aunque de nuevo las palabras de Alejandra resonaron en mi cabeza.

¿No te has preguntado que hay más allá de los centros?

Antes de que ellos llegaran, estaba completamente segura de que no había nada más que ruinas y contaminación, pero ahora ella había despertado esa curiosidad en mí, ¿por qué insistir tanto en el hecho de que estar aquí no estaba bien?