Muy bien, como lo prometido es deuda aquí ha llegado lo que me pidieron: la creación del bebé P1, esto es un adelanto de lo que se viene, aún no llega la acción así que calma.
Era un día normal como cualquier otro, el alfa había decidido ir hablar con su antiguo omega, después de todo no estaría tan mal, hablar con aquel que creyó que era su destinado pero vilmente lo engañó. Quizás se estaba volviendo loco, pero realmente su lobo necesitaba ver a su supuesto "destinado" lo necesitaba en alma y cuerpo, más que todo en cuerpo.
Ya estaba frente a la puerta de su antiguo hogar con un nudo en la garganta, no sabía si estaba haciendo bien en venir al lugar que lo hizo sentirse despreciado y sobre todo herido, como todo un poco alfa.
Metió las manos dentro de sus bolsillos y dio media vuelta en su lugar decidido a retirarse, ya que lo pensaba bien, no era bueno recordar su pasado, ese que lo había lastimado. Pero de repente un ruido dentro de la casa fue el que hizo que se volteara rápidamente poniéndose en posición de ataque, segundos más tarde al notar que el ruido no volvió se quedó viendo la puerta y con curiosidad pegó su oreja a esta logrando escuchar bajos jadeos entrecortados y uno que otro ronroneo.
Pasó algo de saliva en su lugar y se apartó de la puerta sintiendo algo extraño en su interior, no puede ser, ¿el maldito omega acababa de entrar en celo? Su respiración comenzó hacerse pesada, bajó la mirada a su entrepierna y de inmediato notó una jodida erección, había olvidado el pequeño detalle de que sus celos eran coordinados.
Unos pasos se acercaron lentamente a la puerta y esta se abrió de golpe, el alfa seguía de espalda contra esta por lo que, sin previo aviso aquel pequeño cuerpo detrás de él lo abrazo y pegó su rostro a la espalda del más alto.
- sueltame.
Le ordenó el alfa pero el más bajo no se inmutó, sino en cambio reforzó el abrazo comenzando adentrarlo a la casa. El alfa se sentía algo inquieto pues su naturaleza quería salir a la luz, pero claramente no lo iba a permitir, esperaba no perder pronto la cordura.
- mi hija está durmiendo así que procura no hacer ruido.
Murmuró el omega apartándose del alfa, en eso llegó una idea a su mente y de inmediato corrió hacia la puerta de la casa poniendole seguro a esta, no iba a dejar que se escapara, tenia que decirle unas cosas, pero la verdadera razón por la que no quería que se fuera era por que lo necesitaba cerca.
- antes que nada quiero pedirte una disculpa, se que no debí hacer muchas cosas que pasaron y que me equivoqué al no elegirte a ti, pero ponte en mi lugar, estaba confundido, yo quería que lo nuestro funcionara, pero quería aún más que funcionara mi relación con el papá de mi bebé, con él cree un vínculo muy grande y realmente me costó mucho dejarlo ir, por eso pasó lo que pasó.
Dijo el menor observando cómo el alfa se encontraba ya en el sofá, con la frente ligeramente sudada y con los puños bastante apretados, claramente reteniendo todo lo que comenzaba a sentir. Sabia que lo estaba alterando.
- deja de expulsar tus jodidas feromonas mientras me hablas.
El alfa pasó saliva pesadamente y se mordió el labio levantándose del sofá, ya se iba a ir, si, se quería ir de ahí, no podía retener más su instinto de follar.
- abreme la puerta Jimin, no quiero cometer un error, estamos ambos en celo y si llega a suceder algo entre ambos queda bajo tu responsabilidad ya que no me quieres dejar ir.
Así van a estar esos dos dentro de poco, si quieren algún extra para la "acción" deben decírmelo en menos de 12 horas.
Espero que le den mucho amor, nos leemos pronto. 👀