Capitulo 28.02

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Dos semanas después.

—Baekhyun, mírame, estoy aquí. Recuerda lo que hablamos.

Haneul le dijo a Baekhyun, tratando de que él no hiciera ninguna estupidez. Los dos estaban sentados en unos de los bancos que habían en el patio de la universidad, y, en una esquina, en el mismo patio, se encontraba Jungkook, sentado el muro de una jardinera, con las piernas abiertas, lo que le permitía a ________ acomodarse entre ellas, mientras los dos se repartían mimos y arrumacos que hacían hervir la sangre del moreno.

Baekhyun había cerrado los ojos a la vez que apretaba la mandíbula hasta hacer que le rechinaran los dientes, para obligarse a no volver a montar una escena, pero le estaba costando un mundo. ¿Por qué no pudo quedarse todo cómo en las últimas dos semanas? Había conseguido hablar con Haneul y llegar a un acuerdo para continuar juntos. Aunque al principio ella había creído que él diría que todo entre ellos había acabado.

—Puedes ahorrarte las excusas. Ya sé que se acabó. Ahora, por favor, vete— Le había dicho sin titubeos, aunque con voz apagada y con la mirada clavada en el piso, una vez estuvo devuelta en el apartamento. Después se dirigió a su cuarto y cerró la puerta de un portazo.

Baekhyun dudó un segundo si hacer lo que ella le pedía, pero simplemente no podía irse. Él no tenía intenciones de dejar a la única persona que lo comprendía. Así que fue tras ella y para su suerte, Haneul no le había echado seguro a la puerta.

—Han... — Susurró a la vez que se acercaba a la cama donde ella estaba acostada en posición fetal. Tenía la cabeza tapada con una almohada, lo que no le permitió escuchar su llamado.

Baekhyun llegó hasta su lado y vaciló un momento si tocarla para hacerle saber de su presencia. Término por acariciarle el brazo desnudo.

—Baekhyun... Te dije que te fueras—Haneul dijo con la voz amortiguada por la almohada y el llanto.

Baekhyun se maldijo internamente por hacerle daño, inconsciente y luego conscientemente. No hizo caso a su pedido y siguió acariciándola, hasta sentirla temblar espasmódicamente a causa de los sollozos.

—Thsss...— le susurró mientras se acostaba a su lado, atrayéndola hacia sí y repartía besos en su nuca. Haneul se resistió al principio, pero ya después se dejó abrazar, y algo más, por él.

Rato después que yacían los dos desnudos, abrazados, en silencio, sin saber qué decir, Haneul le preguntó qué hacía allí, que por qué no se iba con la mujer que él amaba y la dejaba vivir su vida tranquila. Baekhyun agradeció que ella estuviera de espalda hacia él y le contestó que estaba con la mujer que él quería, que a la que él amaba... simplemente no podía ser.

—________ sabe lo que sientes por ella— afirmó y él asintió casi inaudible — ¿y ella siente lo mismo?— le preguntó.

Baekhyun suspiró.

—No lo sé— respondió con sinceridad —Ella dice que sí, pero yo aún dudo de que así sea—todavía cabía la posibilidad de que su hermana estuviera confundida —pero, aún si ella sintiese lo mismo que yo... Es complicado. Es incesto, Haneul. ¿Si sabes lo que eso significa, más allá de lo repugnante que esto pueda ser para la sociedad?—ella no le respondió de inmediato, como si estuviera pensando en su pregunta. A la final le dijo.

—¿Has hablado con ella? ¿Le ha explicado?

Baekhyun chascó la lengua y rodó los ojos aun sabiendo que Haneul no lo vería.

—________ no entiende de razones. Ella cree que soy un cobarde porque huyo de lo que siento. Sinceramente creo que tiene razón. Mírame, Soy incapaz de hacerle frente a esto que siento, solo. Estoy aquí contigo, arrastrándote a mi mierda cuando no te lo mereces. Deberías odiarme y, sin embargo, pese a que sé que te duele, estás aquí hablando de mis sentimientos por otra.

Haneul se giró entonces, quedando de cara hacia él.

—Nosoy una niña, Baekhyun, así que no me estás arrastrando nada—le dijo con untono que Baekhyun no supo definir si era de reproche o resentimiento, pero continuócon uno más conciliador — Pero tienes razón, no te odio, aunque debería—luegose sentó en la cama, abrazándose las piernas. Lo miró a los ojos y por unossegundos no dijo nada más. Después suspiró —No soy tonta Baekhyun...— dijo peroél la interrumpió.

—No hedicho que lo seas...

—No, déjameterminar de hablar. He dicho que no soy tonta. Si estás aquí es porque noquieres que lo nuestro se acabe. Si estoy aquí, si te he permitido que me hagasel amor otra vez, a pesar de lo que sé ahora, es porque yo así lo quise. Quieroque te quede una cosa bien clara, Baekhyun. Yo te quiero, y no te lo digo paraque creas que por esto tienes el poder de manipularme y lograr que yo haga loque tú quieras. Te lo digo para que sepas que si decido aceptar que continuemoscon esta relación, es por mi propia voluntad. Pero, óyeme bien, Baekhyun, nopienso ser de esas chicas que se hacen las ciegas cuándo sus novios las engañansólo por temor a perderlos. Así que desde ya te digo que no toleraré queintentes algo con... tu hermana, mientras estés conmigo. Si eso sucede, y créemeque lo voy a saber si es así, esto se acaba.

—Qué teparece si vamos a comer un helado mientras se hace la hora para que entres a lasiguiente clase— Haneul le sugirió y no esperó por su respuesta, sólo selevantó del banco, lo tomó de la mano, animándole a que él también se levantasey la siguiera.

Después de aquella conversación, el nivel de intimidad entre ellos habíaevolucionado, hasta el punto de ella saber qué era lo que él necesitaba sin siquieradecir media palabra, cuándo le mentía sobre cómo estaba y, lo más importanteaún, Haneul siempre hacía que él no tuviera ni un sólo segundo libre, parapensar en lo que no debía pensar, ni hacer lo que no debía.

LET'S PLAY-B.BHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora