"STRONG." Seven Kayne.

Siete. Dos hermosas decisiones.

Astrid.

Los días de cuarentena habían empezado, pero no como yo pensaba que iban a ser.

Joaco pensó que quizás nos íbamos a aburrir estando los dos solos así que tomo dos hermosas decisiones sin consultarme. La primera, adopto dos perros gigantes que aún son cachorros y no me quiero imaginar lo que van a ser cuando crezcan y segundo, lleno la casa de amigos para que pasemos todos juntos la cuarentena.

Mi casa contaba con más de diez personas y dentro de esas personas estaban: Cazzu con el CRO, Khea con Agus (yo voy a seguir shipeando a Khea con Agus Padilla y ustedes me van a fumar), Coscu junto con la Chilena, el Duko junto con su nueva "novia" Brenda, Bhavi con Male, Neo e Ysy.

Por un lado era extraño ya que desde el incidente no había vuelto a tener mucha relación con tanta gente, pero quizás este sería el momento para volver tranquilamente a la comunicación con el mundo.

Los días iban pasando y la convivencia era bastante buena y llevadera, todos ayudaban, todos aportaban y hasta teníamos turnos para las cosas básicas de la casa como la cocina, los platos, la limpieza. Hasta nos armábamos nuestras mini jodas en el salón de la casa.

- ¡Reunión de mujeres en mi habitación!- grito Juli y salió corriendo escaleras arriba.

Nos miramos entre todas las mujeres que estábamos en el living, nos encogimos de hombros y nos levantamos para ir hacia donde estaba Juli.

(***)

Después de una larga y extensa tarde de mujeres, donde habíamos decidido que esta noche la sala de juegos seria solo de nosotras esta noche bajamos las escaleras para avisarles a los hombres de esa decisión y de que hoy les tocaba cocinar a ellos y a nosotras elegir la película.

Todos nos miraban confundidos y hasta algunos se habían atrevido a negarse a nuestra petición.

- Déjenme ver si entiendo, ¿Quieren el salón de juegos toda la noche?- pregunto el Duko a lo que asentimos todas.- ¡Ni loco!- grito mientras se cruzaba de brazos.

- A ver amorcito, no te confunda. No era una pregunta.- contesto Brenda.

El solo resoplo y camino hacia la cocina seguido de todos los otros hombres de la casa. Nosotras nos sentamos en el living y decidimos poner una película romántica solo para molestarlos.

(***)

Eran las 3 de la mañana y mientras los hombres del grupo se encontraban mirando la televisión aburridos nosotras por nuestra parte estábamos prácticamente de joda en el salón de juegos.

Alguien golpeo la puerta y cuando la abrió nos encontramos con seis hombres que tenían la cara de perritos mojados y como más de una acá somos muy pollerudas de nuestros novios optamos por resignarnos y dejarlos entrar.

De cualquier manera nos faltaban jugadores, ya que no nos daba abasto las manos para jugar al tejo, al pool, la play, cartas y ping pong a nosotras cuatro solas.

- ¿Sabes lo que te extrañe?- escuche su voz detrás de mi mientras pasaba sus manos por mi cintura y me abrazaba.

- No nos vemos hace 2 horas cuando mucho.- rodé los ojos mientras me volteaba.

- Y eso es mucho para mi.- hizo puchero.

- Estábamos del otro lado de la puerta.- comente mientras me reía.

Él se rio junto conmigo y me dio un suave beso para irse a jugar con Khea a la play. Yo por mi parte fui a jugar a las cartas con Brenda mientras me contaba la historia de cómo había conocido al Duko.

Poco a poco se fueron sumando todos a la ronda y cuando nos descuidamos éramos doce monos jugando a las cartas y bordeándonos mientras nos acusábamos de hacer trampa los unos a los otros.

Creo que puedo decir que hasta ahora la cuarentena está saliendo bastante bien.

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Se que quizás yo nunca interactuó con ustedes. Pero quiero que sepan que leo cada uno de sus comentarios y me mas de una vez me llenan el corazón.

Son ustedes la razón por la que no he abandonado esta novela. Y dudo mucho hacerlo, ya que noto su apoyo todo el tiempo.

¡GRACIAS!