Razón 2

62 5 0
                                    

Cuando me enfermaba  me visitaba, me hacías una rica sopa y un malo, que al final me ayudaban a recuperarme. Pero tus chistes malos y tus carcajadas tan escandalosa me servían fe medicina.

Gracias por estar ahí cuando más te necesito.

10 Razones para estar contigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora