Capitulo 20

8.6K 443 14
                                    

El cantar de los pájaros por la mañana era hermoso, la hermosa y cálida brisa que abraza el cuerpo de los arboles, el ruido de la naturaleza era lo mas hermoso, una Ojiverde que dormía plácidamente en el suelo, con su brazo estirado, mientras la otra reposaba en su abdomen, la Morena estaba acostada con los brazos estirados y el cabello alborotado en su hermoso rostro, se levanto bruscamente.- ¿Donde estoy?, ¿donde estoy?.- Pregunto aun dormida, tomo la alarma de la mesa.- ¿A que hora son?.- Toco los botones del control remoto, y esto hizo que se abrieran las persianas de la ventana, permitiendo la entrada de los rayos solares y haciendo mucho ruido, tomo el control remoto y trato de parar el molestoso ruido, las persianas pararon y Camila suspiro, gateo hasta el borde la cama para ver si Lauren había despertado, pero no, estaba plácidamente dormida, regreso a su lugar y soltó otro suspiro un poco mas ligero.

Dejo el control en la mesita del lado izquierdo y miro su rostro en aquel pequeño espejo, su cabello estaba horrible, su ligero maquillaje se había corrido un poco, se acomodo en la cama y trato de acomodarse el cabello con los dedos.- ¡Hay que horror!.- Susurro, tomo del lado izquierdo de la pequeña mesa con cajones,  su labial, con la yema de los dedos se aplico un poco, le hecho un vistazo a Lauren para comprobar que aun seguía dormida.

Dejo el labial en la mesita, se dio unas leves palmaditas en las mejillas, se retiro las la gañas de los ojos,  tomo su cabello en un coleta e iba acostándose lentamente en la cama, se espanto al oír toques en la puerta.- Servicio a la habitación, desayuno para las prometidas.- Camila estaba en shock, Lauren estaba en un sueño profundo.- Lauren, Lauren, Lauren.- Susurro para que solamente la escuchara la Ojiverde.

Mmmmm.- Se quejo la Ojiverde.- Lauren.- Tomo una almohada y la aventó con fuerza al rostro de la Pelinegra, esta se despertó y miro molesta a la joven editora-empresaria.- ¿Qué?.- Pregunto con una voz rasposa.- Tu madre esta ahí.- Señalo a la puerta .- Arriba.- La Ojiverde aun confundida, tenia el cabello alborotado, pero le importaba muy poco.- Un segundo.- Comento la Morena levantando un poco la voz para que los padres de Lauren la escucharan.- Dame tus cosas.- Susurro, y la chica empezó aventarlas hacia la cama, aventó su almohada y sus cobertores.

La joven editora acomodo la almohada y los cobertores.- Espera, la fabrica de bebe no, la fabrica de bebe no.- Susurro, la Ojiverde se quito la polera y entro a la cama.- Espera, ¿que haces?.- Pregunto nerviosa.- Es solo la finta de que dormimos juntas, ademas siempre me duermo asi, pero lo de abajo lo dejo.- Ademas, espera.- Miro con delicadeza el rostro de la joven.- ¿Que?, ¿que?.- La joven dejo acomodar los cobertores.

Espera, ¿te maquillas para dormir?.- Pregunto con sarcasmo.- ¿Que?, ¿que?.... No... no, claro que no?.- Contesto nerviosa.- Ven, abrázame, abrázame.- La Ojiverde no sabia como, así que acerco su cuerpo a la de la Morena, esta sintió el miembro de la ojiverde.- ¿Qu-qué haces ?.- Tenia un leve rojizo en sus mejillas.- Te abrazo.- Respondió lo obvio

La Morena se giro y tomo de los hombros a la Ojiverde la recargo en la encabezara de la cama, tomo la mano de la izquierda, se recostó en el pecho de esta y coloco la mano tomada alrededor de sus hombros, la Ojiverde inconscientemente empezó hacer leves caricias en el cabello de la joven, la Morena empezó a jugar con los dedos de la chica, se miraron ambas, y no resistieron más, comenzaron un suave y tierno beso, ambas habían olvidado a las personas que se encontraban al otro lado de la puerta, la madre toco nuevamente.- Entrare, permiso.- Informo, las jóvenes se separaron y se dieron un pico ambas sonrieron y miraron a la madre de la Ojiverde.

Traía una bandeja con un desayuno exquisito.- Mmmm, huele realmente bien mamá.- Se acerco a la Morena y le susurro.- Me gusta mas tu olor.- Beso aquella zona, los vellos de la chica se erizaron.- Si, realmente huele bien.- La señora solo alzo los hombros.- Es mi especialidad hacer roles de canela y una rica taza de café descafeinado y un capuchino para mi joven hija.- Madre, no te hubieras molestado.- Comento con una bella sonrisa la joven.- La señora tomo el control para abrir un poco mas las persianas.- No es ninguna molestia mi amor, lo hago con gusto.- Le regalo una hermosa sonrisa a ambas.

La Propuesta Camren G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora