Mi alarma sonó muy temprano por lo cual me enojé ya que era sábado y quería seguir durmiendo. No conseguí dormir nuevamente asique desayuné y decidí ir a andar en bicicleta por las calles.
-¿Puedo acompañarte?¿Si?¿Si?-Joana quería acompañarme siempre a todos lados pero eso no me molestaba.
-Sí, vamos.
Jazmin me estiraba los brazos para que la levantara del suelo y la cargara en mis brazos. La levanté, le di un beso y la dejé en el mismo lugar en el que estaba. Cuando vio que nos ibamos comenzó a llorar asique la llevé conmigo. Cepillé el pelo rubio y rizado de mi hermanita y se lo até con un moño.
Mi bicicleta tenía un pequeño asiento en la parte trasera así que puse una almohada y senté a mi hermana menor.
Joana tenía su propia bicicleta así que comenzamos a andar por todas las calles.
-No vayas muy rápido Zoe-Joana gritaba atrás mío-Zoe me da miedo ir rápido.
Jazmin se reía y gritaba, le encantaba que la lleve a andar en bicicleta y más si íbamos rápido.
Luego de un tiempo me cansé de tanto pedalear asique esperé a mi hermana que venía caminando, llevando su bicicleta con una mano y con la otra tomaba agua.
-Dame un poco-dije.
●●●
Llegamos a casa y mamá estaba mirando televisión con Lizie (a veces llamábamos así a mi hermana mayor)
-Zoe llamó tu papá desde el trabajo, quiere que vayas a hacerle compañía.
Siempre había sido la preferida de papá, él me lo decía siempre y me lo demostraba. Extrañaba pasar tiempo con él. Cuando era más chica solía ir siempre a su trabajo y lo ayudaba.
-Ya voy para allá, má.
-Comé algo antes amor-dijo mi madre.
-Ya me voy, ya me voy.
Le dí un beso a mi mamá y me fui con mi bicicleta.
Al llegar vi a un chico de espaldas lavando a Juno. Era alto como yo y usaba sombrero.
-¿Hola?-dije y el chico me ignoró por completo.
Luego de unos segundos contestó:
-¿Y vos quién sos?-dijo cortante.
-La dueña de Juno-crucé mis brazos y por dentro decía "JA, QUIERO VER CÓMO ME IGNORAS AHORA".
Él chico misterioso se dio vuelta, y pude ver su cara por fin. Su pelo era rubio y sus ojos eran color verde. Estaba completamente mojado debido al baño que le estaba dando a mi caballo.
-Ah, hola. Perdón. Vos, vos, em..¿Se supone que sos la hija de Gabriel?-dijo confundido.
-Exacto.
-Hola, soy Marcos-me extendió su mano y cuando la agarré mojó la mía-Perdón, te mojé.
Reí.
-No importa, soy Zoe, hija de Gabriel, dueña de Juno-sonreí, no podía no hacerlo.
-Creí que la dueña de Tornado era más grande. Me sorprendí.
-Se llama Juno.
-Yo le digo Tornado.
-No gasté 20 minutos de mi vida en elegir un nombre para mi caballo para que venga un chico totalmente desconocido a cambiárselo-dije divertida.
El sonrió y en verdad tenía una sonrisa muy linda.
-Veo que Marcos y vos ya se conocieron-mi papá apareció de repente.
-No tanto-dije.
-Bueno, él a partir de hoy es mi ayudante.
-Ah, qué bien-dije.
-¿Te molesta que lave a Tornado? Perdón, Juno.
-No me molesta pero quería lavarlo yo también-dije.
-Cuatro manos son más rápidas que dos-dijo mi papá y ambos reímos.
Lavamos a mi caballo y cuando terminamos Marcos y yo nos sentamos en el pasto.
-Y entonces,¿cuántos años tenés?-preguntó.
-15 recién cumplidos,¿y vos?
-15 también-sonrió.
Tenía una sonrisa enorme, era hermosa.
-Tengo que irme, se me hizo tarde-dije levantándome del suelo sacudiendo los restos de pasto que me quedaron en mi pantalón-Chau pá, te veo en casa-papá sonrió y me saludó con su mano.
Le di la mano a Marcos, él la tomó y se levantó.
-Te acompaño, Zoe.
-Mmm, prefiero ir sola-dije.
-Cielo, es mejor que Marcos te acompañe-mi papá intentó convencerme.
-Es que..Él está trab...Está bien, pá-dije suspirando.
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Por siempre juntos.
Romance-Pase lo que pase te amo-llevó una de mis manos a su boca, dándole un suave beso. -No quiero que te vayas-una lágrima recorrió mi mejilla. Me acosté en el suelo, a su lado. Apoyé mi cabeza en su pecho. Escuché su corazón y sus gemidos de dolor. No p...