❛ Prólogo❜

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A sus diecinueve años había sido una insuficiencia cardiaca lo que lo había llevado al borde de la muerte, al principio todo parecía ir bien con una medicación constante y una dieta controlada pero poco a poco todo fue empeorando al punto de necesitar un trasplante de corazón mismo que esperó por casi dos meses, hasta que un donador misterioso apareció, estaba realmente agradecido con él aún cuando no le conocía.

Jeon jungkook, el único hijo de la familia Jeon, amante de los deportes y de Kim Taehyung su lindo… en realidad no sabía con exactitud qué tipo de relación tenían, pero sin duda alguna lo adoraba demasiado aún con un nuevo corazón y ahora que ambos podrían caminar tomados de la mano por la colorida primavera estaba ansioso de poder levantarse de aquella incomoda cama.

Tras varias horas de una complicada operación Jeon empezaba a salir por fin de los efectos de la anestesia  hasta que por fin abrió sus ojos de forma perezosa, vagando su mirada por aquella pulcra habitación hasta encontrarse con un rostro conocido, era su madre quien sostenía su mano con fuerza o eso hasta que le vio sonreírle de forma apagada, de pronto y de forma inesperada la mujer de casi cuarenta años empezó a besar su rostro de forma cariñosa lo que llevo al menor a reír de forma sonora antes de tener que separarla con una de sus manos.

—Mamá, ya no soy un niño pequeño.

Ambos guardaron silencio por algunos segundos, principalmente Jungkook, quien aún seguía un tanto adormilado, pero no quería dormir, tenía cosas más importantes que hacer en ese momento tales como...

—¿Taehyung vino? ¿Puedes decirle que pase?

En ese momento la expresión de la mujer cambió rápidamente de alegría a una mezcla de preocupación y tristeza. ¿Cómo decírselo a su hijo recién operado del corazón? Jungkook notó esto y de inmediato alzó una ceja intrigado, ¿estaría enojado por la discusión que habían tenido días antes de entrar al quirófano? Dios, Taehyung era un dramático.

—No, hijo. Él nos dijo que tenía algo que hacer, quizás se quedó dormido...

Mentir pareció la mejor opción. Jungkook suspiró cerrando los ojos mientras venían a él las imágenes de la discusión. ¿Cómo iba a saber que a Taehyung no le gustaban los hospitales? Aunque sí consideraba egoísta de su parte no querer acompañarlo durante la operación, solo eran varias horas de incertidumbre, nada del otro mundo.

Las semanas posteriores estuvo en observación, esperando que todo estuviera bien con su nuevo corazón, según el doctor ambos se habían adaptado a la perfección, como si aquel corazón le perteneciera de mucho antes, aquello obviamente ponía feliz a toda su familia incluido a Jungkook, a pesar del amargo sabor de boca que tenía constantemente por la ausencia de su amigo, ya se las pagaría apenas saliera del hospital. ¡Iba a dejarlo sin besitos por un mes completo!

Finalmente, había sido dado de alta con las recomendaciones de no agotarse demasiado física o mentalmente, mantener una dieta balanceada y no sufrir emociones extremas, debía tener cuidado o podría terminar un par de metros bajo tierra. Él y su familia finalmente salió de aquel lugar con un débil Jungkook siendo empujado en una silla de ruedas a pesar de su insistencia por poder caminar.

Las siguientes semanas las pasó en su cama siendo mimado por su madre, padre y toda su familia en general, pero… aquella pregunta seguía vigente en su cabeza. ¿Dónde estaba Taehyung? ¿Estaría molesto con él? Ya había pasado casi más de un mes, no podía creer lo dramático que era, estaba seguro que sería un actor muy bueno. Lleno de incertidumbre planeo todo con detalle, esperaría a la noche, cuando todos estuvieran en la cama y saldría de la casa para ir directamente a la de Kim, no le importaba si lo recibía en pijama, ya lo había visto muchas veces sin este, no sería un mayor problema.

Con aquel plan en mente Jungkook espero hasta la noche, cuando la luna por fin hacía su aparición en el cielo estrellado y salió con cautela por su ventana, consiguiendo ayuda del árbol que se encontraba en su patio, al estar por fin en allí se mantuvo quieto por algunos segundos, disfrutando de aquella sensación un poco más; la fría brisa nocturna , la tenue luz de la luna y aquellas estrellas que muchas veces había admirado con Kim, buscando alguna clase de figura en estas o simplemente riendo mientras ambos se abrazaban.

Tenía tantos buenos recuerdos con él, aún si sólo se conocían hace dos meses, aquellas veces que ambos compartieron besos, caricias y el sonido de sus cuerpos siendo uno, no pensaba dejar de crear recuerdos de ese estilo por una simple discusión, por lo que, dejando de admirar aquella escena que le erizó la piel, emprendió su caminata hasta el departamento de Kim, no estaba tan lejos así que estaba seguro de que podría llegar ahí caminando sin sudar. Sacó su celular buscando el chat de Kim en donde se encontraban varios de los mensajes que le había enviado últimamente, todos sin una respuesta.

¡No iré, no quiero verte morir!

¡Eres un idiota, por eso nunca seré tu novio!

Recordó amargamente aquella discusión la cuál le había atormentado por días, no había querido decir eso ¡amaba a TaeHyung! Recordaba también que en algún momento este le prometió nunca irse de su lado.

—Tonto Taehyung.

Susurró antes de guardar nuevamente su celular en el bolsillo de su chaqueta. Pocos minutos después estaba por fin en el edificio, subiendo a uno de los ascensores, cuando una cara poco conocida subió junto a él, era la hermana mayor de Kim, Sun Hyun quien extrañamente vestía de negro y al verlo pudo notar como sus ojos se volvieron llorosos. ¿Estaría viviendo algún duelo? Posiblemente esa era la razón por la cual Taehyung no respondía a sus mensajes, quizás había sido un familiar muy cercano.

Bastante curioso el joven de cabellera castaña se acercó un poco a la mayor golpeando de forma nerviosa su pie contra el piso, eso hasta que su voz brotó desde el fondo de su garganta, dejando salir una voz mucho más grave que la que había deseado.

—¿SunHyun? Hey, hola. ¿Cómo estás?

No obtuvo respuesta, quizás no lo había escuchado por lo que carraspeo su voz antes de volver a hablar.

—¿Taehyung ha estado muy ocupado? No lo he visto desde hace bastante tiempo.

Y aquello terminó en una chica sollozando a su lado junto a un asustado Jungkook que no sabía qué hacer, decir o cómo calmarla siquiera, no había entendido qué había hecho mal. Cuando el ascensor llegó al piso indicado las puertas se abrieron y ambos salieron de él, siendo Sun quien cubría parte de su rostro con un pañuelo intentando controlar su llanto, no era nada fácil considerando su posición.

Ambos caminaron de forma lenta hasta la puerta que daba al departamento de Kim, era obvio desde el principio que ambos iban al mismo lugar. Sun abrió la puerta y el indicó a Jeon que entrara, el cual empezaba a tener una muy mala sensación de todo eso. Entró y lo primero que vio fue una fotografía de Kim, todo bien de no ser por el lazo negro que rodeaba una de las esquinas del marco, Jeon trago saliva dirigiendo una mirada confusa a su acompañante, no quería hacerse ideas apresuradas, pero todo empezaba a ponerse bastante oscuro en su cabeza.

—Jungkook, siéntate.

Obedeció en silencio manteniendo su vista fija en la chica, quien inhaló antes de sentarse a su lado con una pequeña mueca de sufrimiento, no, no, no, no le estaba gustando para nada todo esto.

—Tú… ¿Cómo está tu corazón?

—¿Dónde está Taehyung? S-Sun dime dónde está Taehyung.

Para este momento su voz se había quebrado, sus manos habían empezado a temblar y sus ojos ya estaban llorosos, estaba asustado, demasiado asustado como para pensar en otra cosa que no fuera Kim.

—Supongo que tu familia no te lo dijo, pero… no sabes quién fue el donante, ¿verdad?

Sun tomó aire, cerró sus ojos y dejó todo a voluntad de Dios, sabía que sería un golpe duro para Jungkook. Tragó saliva y limpio sus lágrimas nuevamente antes de dirigir una mirada al angustiado chico a su lado, colocó su mano sobre su hombro y, sin pensarlo demasiado, lo abrazó tan fuerte como consideraba adecuado.

-Taehyung fue tu donante él… él no soportaba verte agonizar con tu corazón. Jungkook… Taehyung está muerto.

Heart ~ 태국Donde viven las historias. Descúbrelo ahora