Heart ~ 태국

❛ Uno ❜

Para la persona que amé demasiado, Jungkook.

Hey, hola. ¿Cómo has estado últimamente? ¿Has comido bien? Recuerda no comer demasiadas frituras, sé que te gusta comerlas a escondidas cuando te sientes triste pero eso no es bueno para tu nuevo corazón, debes comer de forma saludable aún si no te agradan las verduras, también recuerda abrigarte muy bien pues mientras escribo esto una débil lluvia empieza a golpear mi ventana. ¿Será acaso el llanto de los mismos ángeles por nuestra despedida? Posiblemente sea solo un mal día de otoño.

Sé que la vida para ti será difícil, pero aún asi debo irme. Te esperaré en nuestra siguiente vida, más allá de las lagrimas que ocultarás bajo la lluvia, más allá de las hojas muertas que caerán, te esperaré para que en un futuro pueda verte sonreír una vez más, para que ambos podamos ver las estrellas y reír mientras nos acobijamos mutuamente. Me siento como si yo fuera la nieve flotando en el aire, a la deriva. Siempre nos gustó identificarnos con las estaciones, ¿no? Tú, la hermosa y radiante primavera mientras que yo solo era el palido y frío invierno.

Honestamente ahora te extraño demasiado y es imposible dejar de sentir ese doloroso sentimiento en mi pecho... por lo que haré y por lo que hice, lamento mucho aquella discusión pero necesitaba una forma de alejarme de ti o eventualmente te diría mi plan, no podía hacerlo, no podía mostrarte a ese yo tan débil, debía ser fuerte en mi decisión. Si lees esto creo que ya sabes de que estoy hablando. Te debo una explicación y es simple; mi tiempo al igual que el tuyo se acababa, pero cuando yo dé mi último suspiro tú podrás disfrutar de esta vida.

Sé que me amas como yo te amo, pero te pido que busques a alguien más, que te enamores y tengas una hermosa familia, esa que el destino nos negó. Para cuando se acabe este frío otoño y vuelvan los días de primavera, donde las flores florezcan otra vez, dejarás de sentir mi presencia en tu vida, nunca te abandonaré pues ahora mi corazón late en tu pecho, solo te pido que lo cuides como si fuera el tuyo… Aunque mi corazón te pertenecía desde hace mucho.

Por favor, recuerda los colores que vimos en el cielo y los aromas de los caminos que recorrimos.

Esta es mi última despedida, mi última carta para ti, y aunque ahora la lluvia no deja de caer como si aquel llanto que mencioné hubiera aumentado, debo dejarte para poder liberar tu mano ahora, para que al menos uno tenga un futuro. Por favor no llores, cuando me extrañes solo cierra tus ojos y escucha el latido de tu corazón, porque yo estaré ahí.

Debes dejarme ir, la cálida primavera te espera y el frío invierno queda atrás… Y junto a el, yo. No llores cuando visites mi tumba, solo sonríe para mí, porque yo siempre estaré contigo.

Kim TaeHyungie.

Aquella carta que Sunhyun le había dado, pero no había podido terminar de leer, era la única compañía que jungkook tenía mientras se sentía paralizado por completo por lo que sus ojos estaban observando... las últimas palabras de su amado. Pese a que los primeros segundos se mantuvo calmado, terminó de rodillas mientras lloraba con una agonía dolorosa. ¿Por qué su cerebro le hacia recordar cada maldito momento que había tenido con Tae? Tantos besos y caricias, todo le atormentaba en aquel momento.

Cuando su pulso aceleró y sus lágrimas no dejaban de caer decidió salir corriendo de ahí sin importarle los gritos de la chica o aquel dolor en su pecho, debía comprobar con sus propios ojos lo que esperaba, con todas sus fuerzas, que solo fuera alguna clase de cruel broma. No quería creerlo, se negaba a hacerlo. Pero al llegar al cementerio y tras buscar un poco lo encontró...

La tumba de su único y verdadero amor.

El ya devastado chico, quien entre sollozos murmuraba algunas maldiciones mientras regalaba débiles golpes a la estructura de cerámica, sentía su cabeza dar vueltas y su corazón latir con fuerza, pero lo ignoró. Si moría ahora mismo ya no le importaba, solo quería ir junto a Taehyung, volver a encontrarlo tal como lo decía en su carta. En medio de su agonía pudo sentir el frío pero innegable tacto de Taehyung sobre su mejilla. ¿Se estaría volviendo loco? Al girar su rostro levemente con la esperanza de encontrar a Kim solo se llevo otra gran decepcion… era una de las muchas flores que la tumba tenía, la cual de casualidad se había movido con el viento rozando su mejilla.

—¿Por qué hiciste esto? M-me prometiste que estrías conmigo siempre pero…

Por impulso llevo su mano hasta su pecho, ahí donde los latidos de taehyung seguían presentes, ciertamente estaba con él pero no era de la forma que él se imaginaba. Lo quería con él, a su lado físicamente. Necesitaba poder abrazarle, poder besarle una última vez… solo una última vez y ya, para poder decirle lo mucho que lo amaba, lo importante que era en su vida y lo que fuera menos lo que en realidad le había dicho por última vez.

¨Si no quieres estar a mi lado durante la operación no quiero volver a verte.¨

¿Por qué el destino jugaba así con él? ¿Por qué lo último que le dijo fue estando lleno de ira?

—No tenia que ser así, tonto.

Completó su frase mientras tomaba la carta que inconscientemente había arrugado en sus manos, admirando nuevamente la caligrafía de Kim, la presionó contra su pecho mientras se acercaba a la lápida donde el nombre contrario yacía escrito en letras oscuras. Jeon se acomodó cerca de esta acostándose allí en posición fetal, aún llorando, solo que esta vez de forma silenciosa. Era una noche fría y oscura pero agradecía que el cementerio tuviera algunos faroles en determinados lugares, por lo que alcanzaba a ver de forma tenue su entorno. Sostuvo una vez más la carta. esta vez dispuesto a terminar de leerla en la compañía de Taehyung

—Taehyung…te amo.