Colores sin humanidad.

Sentir colores.

-Papá siempre me ha tenido alejado de todo y de todos, nunca intenté cuestionar sus razones. Sin embargo ahora que la humanidad se está volviendo frágil comprendo sus métodos, su sentir, el color que lo resaltaba se ha ido y pese a tener la oportunidad para salir él me dijo por última vez que no lo haga.

Quiero explorar los colores aunque sé que no se debe salir; aunque sé también que nada o nadie pueda que comprenda, supongo que sabiendo que la conciencia ha tenido la razón los colores me llaman a salir. Lo siento padre...

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Narra Samuel.

Hace poco me han llamado del hospital; papá se ha ido, el cuerpo por razones obvias no me lo darán.

He tomado tanto aire, sin embargo siento como el aire sigue siendo escaso.

-Su padre dio todo para cuidar a los pacientes pero sufrió de lo mismo que trató de erradicar. Samuel de Luque, lo sentimos pero su padre falleció.

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Quedé el silencio, que se supone se dicen en estos casos si era papá con el único con quien contaba. El único con quién yo hablaba.

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Han pasado tres días desde que papá falleció; pero muchos más días desde que la humanidad está en cuarentena, un virus que hasta ahora nadie puede controlar los mantienes en resguardos las 24 horas desde hace más de un mes. Esto en mi vida es ya desde hace años, más aún hoy rompo el encierro y saldré.

Abrí lentamente la puerta, empecé a subir las escaleras. Se percibe el olor a humedad, el frío de la noche, el sonido de los insectos de aquel bosque donde papá ha construido un refugio bajo tierra.

Mis manos empezaron a sentir hormigueos por pos colores, los veía como neón en su mayoría.

Sentía todo, para otros sería una aurora boreal pero para mí esto ha sido siempre. Manipulo cada color que puedo ver, hago formas, se proyecta todo según mi voluntad y esto papá lo tuvo como lo más bello que había visto sin saber explicarlo.

-Esto solo lo podías hacer tu peque...

Fueron sus palabras cada vez que me veía volar, manifestando con mis manos mantos capturando el agua y evitando caer para volar cada vez más alto.

Quisiera decir que todo fue así siempre pero su temor a que alguien lo descubra hizo que estuviese en encierro pero siempre tener el conocimiento que por más bello sea esto que logro hacer nunca olvide que las personas no lo vean de la misma forma.

-Ten cuidado hijo, eres maravilloso y esto que no puedo explicar muchos lo querrán...

Fue algo que nunca olvidare, pensé que lo podría hacer alguien más pero al parecer no.

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Sostuve el verde agua, simplifique la oscuridad para poder ver ya que no era fácil al estar encerrado. Ilumine el camino para caminar y respirar.

Sentía el brillo de la luna sobre mí, era sentir que me llenaba de energía. Era la sensación de saber que te alimentas con algo que te llena de vitalidad.

Caminé por mucho, sentía las partículas de aquel virus pero casi inexistente en el bosque.

Ellas no podrían lastimarme, de cierta forma soy inmune y quizá esto hubiese ayudado a papá.

Recuerdo que se lo había mencionado.

-Papá y si de alguna forma yo puedo ayudar?

Se lo mencioné al verlo desinfectarse antes le entrar al refugio.

-No te haré nada a ti hijo. Ni siquiera te expondré a que sepan de ti, no tienes ni idea que podría pasar si alguien sabe que eres alguien maravilloso.

-Pero si al menos lo intentas?

Baje la mirada al verlo entrar.

-Podría pero no lo haré, eres lo más importante y eso lo descubrirás sin mí.

-Por qué dices eso?

-Porque en ese camino no estaré yo.

Papá se quedó menos de lo habitual aquel día.

Ahora puedo volar pero temo que alguien me vea.

Ahora puedo hacer todo pues más de la tercera parte de la humanidad ha dejado de existir. Y lo que queda está en peligro pues aun no encuentran la cura.