Amor en tiempos de guerra

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Aviso +18
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Yo solo miraba su rostro, su lindo rostro ya tranquilo responsando en la cama.
Ghoti dijo que la herida fue mínima aunque la pérdida de sangre fue la que si nos dio un susto, pero que se repondría.

—Hay Hipo, ¿porque elegiste estar conmigo?, ¿porque llevas esta vida tan difícil?—pregunté mientras acariciaba su cabello el cual había crecido, empezaba a estorbarle un poco en el rostro—Pudiste haberte casado y nada de esto pasaría—lo miré con tanto dolor, no podía evitar pensar que esto era mi culpa

—¿Porque te detienes?—dijo el entre despertándose

—Oh, ya despertaste— dije

—Eso parece jaja—dijo intentando moverse

—Espera!, no hagas muchos movimientos aún tienes tu herida—dije intentando detenerlo

—Tranquila, solo quiero voltearme hacia ti, que estabas diciendo?

—Nada—dije intentando seguir acariciando su cabello—solo tonterías de mi

—Pues efectivamente lo que escuche eran tonterías—dijo

—¿Que escuchaste?

—Pues que todo era tu culpa y que si porque estaba contigo jaja

—Mmm todo entonces—

—Eso parece, sabes Astrid, esto no es tu culpa, en realidad no hay culpables pero si quieres buscar uno aquí me tienes—dijo sarcásticamente

—Hipo—dije un poco estresada pues no íbamos a estarnos echando la culpa uno a el otro

—Astrid—estiró su brazo y solo mi mano—te amo lo sabes no?

—Creo que si—dije un poco nerviosa

—Y tú me amas a mi?—creo que jilo nunca antes me lo había preguntado tan directamente

—Si—pero respondí con mucha sinceridad

—¿Entonces que más importa?, ¿sabes? Nunca me quise casar con nadie más que no fueses tú—sus palabras estaba haciéndome estremecer, yo no era una vikinga de cosas cursis pero el hacía sacar ese lado de mi

—Hipo, enserio?—pregunté

—Claro, siempre soñé con casarme con la rubia más hermosa del archipiélago—dijo moviendo su cuerpo y acercándose más a mi—está claro que me volví loco cuando te vi que estabas con ese tipo

—Hipo, jajaja imagínate yo cuando estabas con ella—dije entre risas

—Ahi esta!, ambos teníamos este sentimiento, sabes lo que decían los antiguos dioses?

—¿Que cosa?

—Que existen las almas gemelas, y cuando dos personas están destinadas a estar juntas, no importa cuantas pruebas sean puestas, esas personas siempre regresarán,
Tú eres mi alma gemela Astrid

No dije nada, sus palabras estaban apunto de hacerme llorar, Hipo era lo que yo quería en mi vida, solo pude besarlo, un beso dulce al principio que después a causa de el se intensificó, yo no conocía esta parte de el, esta parte sexy, muchas veces cuando estábamos en la academia o cuando éramos jinetes yo lograba ver el cambio en el cuerpo de Hipo, yo sentía la mirada de las otras chicas hacia el, pero no sabía que dentro de este chico tierno se escondía este nuevo Hipo, que me estaba besando con tanta pasión

—Hipo—dije entre besos—espera tu herida

—Tranquila, estoy bien—dijo separándose un poco—¿Quieres que pare?

Eres tú | Hiccstrid-TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora