🥀 6 🥀

975 119 51
                                    

—¿Cómo va tu pie? — me asusté al escuchar esa voz de repente y más en la desolada biblioteca.


—Por el amor de dios, ¿Cuándo llegaste aquí? — me giré por completo a verlo, no venía solo...estaba con su amigo de aquella vez.


—Hace un momento, te ví desde aquel pasillo — señaló el pasillo de los libros de Biología Universal. —Y pase a saludarte y ver cómo estaba tu pie — señaló mi pie, el cual tenía la calseta y el zapato.


—Oh...pues, y-ya está mejor — estaba a punto de decirle que está mañana desperté sin un pie morado y adolorido, y eso había sido completamente extrañó. —Gracias por preguntar y por la ayuda de ayer — sonreí.


—No hay de qué...¿Podemos sentarnos en tu mesa? Nos aburre estar solos — dijo, y fue entonces que pude ver que tenían libros con ellos.


—Oh, claro — ellos asintieron y se sentaron.


Abrieron sus libros y empezaron a leer, mientras que yo, sacaba información importante del libro de Química, nos habían pedido hacer un resumen detallado sobre las partículas, las células, los átomos y como funciona el número atómico.

Un escalofrío recorrió mi espalda dorsal al levantar la mirada por un segundo y verlo ahí, parado enfrente del estante que estaba al final del pasillo. Tragué saliva pesado, mi respiración se entre corto, miré disimuladamente a los dos chicos que tenía en mi mesa, pero ellos parecían inmersos en la lectura.


—Culpable, culpable, culpable... — otra vez aquellas voces, que se volvían susurros a mi persona.


Mis ojos se llenaron de lágrimas, no quería gritar como loca desquiciada cuando sentí una respiración en la parte de atrás de mi cabeza. Mire hacía dónde estaba el último estante, pero no había nada ahí.


—Lisa — su voz chocó con el lóbulo de mi oreja, su voz había sido grave, muy grave, haciendo que el grito que tenía retenido en mi garganta fuera soltado, mientras me ponía de pie, presa del pánico.


Ambos chicos se asustaron por mi repentino gritó, me miraron confusos.


—¿Qué tienes? ¿Qué sucede? — JungKook se acercó rápidamente hacia mí, y me hizo miraron mientras gruesas lágrimas bajaban por mis mejillas. —Mírame, tranquila — su mirada se conecto con la mía.


Por una momento, sentí como si conociera a JungKook de toda la vida, sentí que éramos uno sólo, las lágrimas y gritos quedaron olvidados.




Narrador.



Cuando ambos conectaron sus miradas, los ojos de Lisa pasaron de ser cafés a unos muy bonitos azules, casi grises. JungKook quedó estupefacto, al igual que TaeHyung, quién miraba desde atrás de JungKook.


—¿L-Lalice? — preguntó con miedo e inseguridad de que lo que estaba viendo, fuera producto de su imaginación, que le daba una mala jugada. —¿E-Eres tú?


—Sí, Kookie — el bello apodo que Lalice le había dado a JungKook cuando aún estaban juntos, cuando Lalice estaba con vida y no siendo alguien más. TaeHyung llevo una mano a su boca, sorprendido por lo que sus ojos azul cielo estaban viendo.



JungKook sonrió en grande, y Lalice igual, pero eso duro poco ya que el cuerpo de Lisa se desplomó entre sus brazos.



—Tienes razón...Lalice aún vive.






—LaOmmaChida💜✨✨

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 27, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Forever and always. [🥀 LizKook 🥀]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora