Un amor Inquebrantable

-Capitulo 6-

Jueves 28 de Noviembre del 2019

9:12 a.m

- Estaba comiendo una gelatina de uva aun en mi camilla de hospital, ya hace unos minutos había llegado mi padre, y me explico un poco mejor lo que había pasado aun estaba aturdida por lo que esta pasando, tengo muchas dudas que aclarar, pero hasta ahora la única persona que me puede responder es Santiago el cual no se encuentra aquí ahora, y no se donde encontrarlo pero escuche que estaba en su hogar....quiero correr e ir a buscarlo y abrazarlo pero no me dejan irme, al menos hasta que los exámenes que me hicieron muestren que todo esta bien.... eso fue hace 6 horas -

- Padre por favor deja de llorar - dije al verlo soltar mas lagrimas no deseadas, fue inevitable no llorar es nuestra primera vez, al menos la mía, en que lo puedo ver alto, cabello recogido y ojos parecidos a los míos y limpiarselas rápidamente - estoy bien hija solo... me siento demasiado... - sollozo - no se ni como sentirme - me miro con cariño - le debo demasiado a ese chico, el siempre a sido una gran persona a pesar de todo cua... - no pudo terminar su frase puesto que el doctor Fabian entro junto a una enfermera la cual sostenía algo entre sus manos. -

- Señorita Sorni - hablo Fabian un joven muy alto, piel blanca ojos brillantes como el sol y cabello como las rosas que se encontraban en mi habitación- los resultados de sus exámenes han llegado y por lo que e leído podrá salir de aquí pronto, pero tendrá que salir con lentes de sol para que sus ojos no sean afectados - la enfermera se acerco a mi y me entrego el objeto en las manos- la enfermera tomara algunos datos para terminar, cuando lo haga usted podrá salir cuando este preparada del hospital - me dijo con una sonrisa en su rostro. -

- Gracias Doctor Fabian - dije imitando su gesto - por favor - dijo - llámeme Rojo, así me llama Santiago, usted también puede llamarme de esa manera. - finalizo para luego salir de la habitación, la enfermera se acerco y empezó a hacerme algunas preguntas sin importancia lo que quería en estos momentos es salir de aquí y buscar a Santiago. -

- Listo señorita, hemos terminado en el servicio esta su ropa para que pueda cambiarse con permiso - dijo, para luego retirarse de la habitación - ven te ayudare a levantarte - dijo mi padre, para ofrecerme su brazo para levantarme lo cual acepte, tampoco es que no supiera caminar pero quería irme. -

......

- Recibí una llamada la cual mi acompañante respondió y lo acerco a mi para poder hablar con privacidad - " Santiago? " - escuche la voz atravez del celular, era Rojo - " ¿Como se encuentra? " - fue lo único que pude decir - " se encuentra bien, todo salio perfecto " - lo escuche decir - " ella no esta perdiendo ni un segundo, quiere ir a verte... ¿que harás cuando ella salga de aquí y valla directo hacia ti? " - suspire, es algo que no podre evitar toda la vida - " la verdad....no lo se ". -

- " Te das cuenta de que le diste tus ojos a una chica que no te ama... ¿verdad? " - eso dolió - " no es cierto " -dije serio- " se los di porque ella se los merecía... yo " - se me hizo un nudo en la garganta- " quiero que ella sea feliz con alguien que la quiera tanto como yo la amo " - confesé, ya no poda negarmelo mas- " y pagaste mas de 10 millones de dolares por esta operación solo para que ella sea feliz... " - menciono no se que responder - " amigo...ya no existen los tipos como tu... " - un silencio incomodo se formo en nuestra conversación - " tienes a alguien que te cuide por lo menos?... no puedes estar solo en casa en esa condición " " no te preocupes " - dije - " si tengo a alguien " - lo escuche suspirar - " esta bien cuídate Santi " - sonreí - " tu también Rojo cuídate " - dije para finalizar.-

......

- Llegue a la puerta lo mas rápido posible y toque el timbre, mi padre paso dejándome puesto que tiene una reunión importante dentro de treinta minutos, no me importo mucho la verdad solo quiero verlo en estos momentos, la puerta se abrió mostrando a una chica de cabello como el sol corto y ojos de un color algo oscuro - busco a Santiago - la chica no dijo nada y me dio paso al interior de la casa.-

- Al entrar todo estaba muy callado y ordenado - por aquí - dijo la chica me guió subiendo las escaleras hacia una de las habitaciones.. grande, una cama de colores como las hojas de los arboles un sillón junto a un lugar con muchos libros, en el sillón pude ver a un hombre sentado en el se veía tenso acaso el - Santiago... - el levanto su cabeza mostrando una venda que tapaba sus ojos y de una forma hizo preocuparme - S-santiago. -

- Hola Eli - dijo mostrando una corta sonrisa en sus labios, me acerque sentándome junto a el - les daré un momento a solas - dije la mujer para luego salir de la habitación - ¿ como te encuentras ?.

- Bien... bien, Santiago que es... - no se como decirlo - porque... tienes una venda en la cabeza?.

- Porque.... -suspiro- porque te done mis ojos para tu cirugía. - finalizo -

- En ese momento quede conmocionada, de mi boca no podía salir ninguna palabra, en mis oídos ya no escuchaba nada y esa frase rebotaba en mi cabeza, esto no puede estar pasando - que... de que... - lo mire, la venda cubría sus ojos y aun no quitaba su sonrisa tensa - no santiago tu no puedes...no debiste tu - no puedo correctamente no me salen las palabras siento lagrimas caer por mis mejillas quiero llorar.. pero.. - ¿ por que ? - mi voz salio quebrada -

- Porque te amo Elizabeth - solté un sollozo fuerte y las lagrimas no tardaron en caer y mis manos fueron hacia mi boca para taparla - se que no podre verte otra vez pero al menos se que fui feliz con ver tu rostro por ultima vez - cállate...deja de hablar, tape mis ojos no quiero ver...no puedo - no.. no quiero ver por favor..quitármelos de nuevo tu no puedes quedarte así -dije al borde de gritar. -

- Solo quiero que encuentres a alguien que te ame como yo lo hago... se que encontraras a esa persona... por eso te di mis ojos... para que puedas disfrutar lo bonito que es ver a la persona que amas junto a ti. - vi en sus mejillas unas lagrimas que caían -

- No quiero ver.. - solloce - no si la persona que amo no puede verme a mi -ya no aguante mas, me estaba ahogando en llanto-

- Te recuerdo... y eso me hace feliz - no lo deje terminar - ¡NO! tu no merecías esto...

- te escuche decir un día ...cuando te quedaste en mi casa... cuando deseabas ver, me dolió cuando lo dijiste, así que busque la manera de que pudieras ver y lo logre.-

- no puedo decir nada rompí en llanto no podía decir nada, estaba temblando no quería ver nada -

-Elizabeth acércate.. - con todo el dolor de mi alma lo mire aunque no podía decir nada mas me acerque a el sintiendo sus brazos rodearme, correspondiendo a su gesto llorando en su hombro-

Continuara

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