~Desi y Vegetta~

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Dedicado a Tolkienista4ever

El sol bajaba por las montañas de Karmaland. Dejaba un tono rojizo en el cielo. Un par de amigas se dirigían a la casa que tapaba el sol a casi todo el pequeño pueblo.

-No me puedo creer que tengas una cita con Vegetta- decía Akira, la mejor amiga de Desi. Anteriormente había salido con Vegetta, pero cuando terminaron acabaron bien, ahora eran mejores amigos y se llevaban muy bien.

-¡No es una cita! Aunque estoy un poco nerviosa... - rio mientras daba una vuelta sobre si misma. Iba con una camiseta de tirantes negra y una falda morada - ¿Voy bien?

-Guapísima- río Akira mientras la acompañaba hasta casa de Vegetta- Y sobretodo, se tu misma.

-Hasta luego, Akira- mientras ella se iba, tocó al timbre de la isla flotante-

Inspiró y expiró rápidamente. Estaba bastante nerviosa. Porque se alteraba, ¡Sólo es una quedada de amigos! ¿Verdad?

-Bienvenida Desi- Abrió las puertas de su palacio. Iba con un traje negro y una corbata morada- Vas guapísima hoy.

Subieron por el ascensor de la torre central y fueron hasta una zona donde había preparado un columpio-sofa, con luces de exterior y flores alrededor. Ambos se sentaron y miraron al cielo sin decir nada.

El cielo estaba despejado. No había ni una nube y las estrellas se podía apreciar. Ambos tenían vergüenza de decir algo. Además estaba en un silencio muy cómodo.

-Desi... Te tengo que decir algo...- Ella giro la cabeza para mirarlo y el le agarró de la mano suavemente.- ¿Recuerdas que te dije que me gustaba alguien, alguien de Karmaland?

-Es Willy, ¿Verdad? ¡Lo sabía!- fingió un poco de entusiasmo, aunque el sentimiento era todo lo contrario.

-No, Desi, no- rio un poco para suavizar la tensión. Besó su mano y la volvió a mirar de nuevo. -Me gustas tú. Realmente me gustas tú.

-¿Enserio? No me mientas, De Luque. Con esto no se juega- Ambos rieron y Vegetta asintió origulloso- Igualmente, Rubén ya me lo había intuido.

-Es tontito, no se porque le cuento las cosas- Ambos rieron y ella puso las manos en su cuello. Después de un par de segundos de espera, ambos se juntaron en un cálido beso. No fue un beso muy largo, pero fue mágico.

-Te quiero, Triple siete-

-No me llames así- La miro serio pero luego volvió a reir- Tu me puedes llamar como quieras. Yo también te quiero.

La cuarentena me inspira a escribir un rato :D
Ya podéis apreciar que lo mío no es lo romántico.

One shots / Karmaland 4 /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora