The Dark [H.S]

Capítulo 6

*Narradora ____*

-Veo que ya te lo has quitado-dijo Harry al llegar a casa.

Me quedé unos segundos pensativa.

-¡Dios! ¡Cuando te dejé en casa te dije que no te lo quitases jamás!- dijo casi gritando.

Harry se quedó unos momentos en silencio.

Yo parecía un espantapájaros en mitad del salón.

-¿Si es tan importante? Puedo… puedo ponermelo si quieres.

Harry miró hacia el techo y luego volvió a fijar su vista en mí.

-¿En serio me preguntas si es importante? -Bajó la cabeza y sonrió- Vaya…Te dejé aquí en casa y me tuve que ir ya me llamaron de la oficina y te pedí que no te lo quitarás en ningún momento, ____. ¿Tan difícil es para ti entender lo que te dije?

Entonces empecé a ponerme nerviosa.

-Perdona, es que me duché y me quité el collar. Pero no pasa nada iré a ponermelo de nuevo , no es tan grave.

*Flashback*

Después de salir de la tienda de Maira, Harry me había llevando a una joyería.

-¿Te gusta? -preguntó Harry monstrandome un  collar de plata con el nombre "Harry" en cursiva.

Asentí enamorada de aquel collar.

*Fin del Flashback*

Harry no apartaba la vista de mí, me observaba con el ceño fruncido.

-Voy a la habitación.

Me dispuse a dar la vuelta pero Harry me paró en seco. Y me cogió por los
hombros y bajó la cabeza intentando respirar con la mayor suavidad posible.

-Sé que es importate para ti, ha sido un error- le digo demasiado nerviosa.

-Voy a hacerte razonar, es fácil. Te lo ordené ¿cierto? -pregunto.

-Sí -susurre.

-Ese collar no es una joya, no es un elemento decorativo que pasees por ahí. En él está escrito el nombre de la persona a la que te entregas, cuándo lo aceptas, cuándo te lo pones; significa que perteneces a él, que te entregas, que cedes y acatas lo que venga de él. No es algo que te quites y te pongas, es parte de ti ahora- dice firme.

-No volverá a pasar, te lo juro.

-Claro que no…-susurro para cogerme de la mano y subir las escaleras en dirección al baño.

Me temía lo peor.

Abrió el agua fría, puso el tapón de la bañera y se arremangó delicadamente y sin prisas.

-¿Qué vas a hacer? -pregunte con miedo.

-Ponte de rodillas -me espetó- Ahora.

Obedecí.

Harry miraba el agua esperando a algo y después me miró y me cogió de la cara, pero me aparté enfadada.

¿QUE COÑO HACÍA?

-Ese carácter… -me agarró por la nuca y acercó la boca a mi oído - Me la pone dura -susurró.

-No eres justo -solté enfadada.

-El mundo no es justo, amor mío.

Tras decir esto me sumergió la cabeza en el agua helada de la bañera.

Intentaba zafarme de él, pero me mantenía fuertemente. Tras unos segundos, me sacó.

-No me olvidaré nunca de lo que me dicen. Repite -dice frío como el agua.

La rabia se apoderó de mí y negué con la cabeza. Otra vez me sumergió en el
agua y me mantuvo un tiempo así.

-¡No me olvidaré nunca de lo que me dicen! - grité .

-No, no me olvidaré nunca de lo que me dicen porque si no seré castigada -me dice.

Me sumergió de nuevo sin soltarme y al poco tiró de mí mientras tosía.

Casi no me creía lo que me estaba haciendo.

-No quitaré la cara cuando me toquen, mis faltas de respeto no me benefician.

-¡Harry! -suplico.

-Repite.

-¡No quitaré la cara cuando me toquen, mis faltas de respeto no me
benefician!- grité de nuevo.

Otra vez sentí como el agua me invadía la cara y la presión de la mano de Harry me hundía hacia abajo. A los pocos segundos tiró de mí.

Me soltó y caí de culo en mitad del baño; el agua corría por toda
mi ropa, el suelo y parte de la tarima del baño.

Escupía el agua y miraba al suelo totalmente desorientada.

-¡Te pedí que me perdonaras! -le dije a punto de echarme a llorar.

-Y lo he hecho, princesa -su voz suave y pausada volvió aparecer. Se levantó y salió del aseo.

Autodestrucción es todo lo que me repetía internamente.