SLEEPTALK | KTH+JJK【Adaptación】

Awake 9

—Vengo en lugar de KooKoo, él... No podrá venir por un tiempo.

Niego, no quiero escucharlo.

Tardó unos cuantos minutos en despertarme, para entonces, JiMin se dio cuenta y ya está frente a mí, sus manos están sobre mis hombros y me pide que me tranquilice con voz temblorosa.

—Kookie, ¿Dónde está? ¿Qué pasó?

Quiero gritar su nombre, pero no quiero quedar como un loco, las lágrimas comienzan a caer y todo mi cuerpo tiembla.

—Él está bien, TaeTae, en serio, Kookie está bien. —dice.

—Él no está, no te creo, ni siquiera te conozco, ¡Déjame! —aparto sus manos de mí con brusquedad, el llanto se acumula en mi pecho y comienzo a respirar agitado por los sollozos que quieren salir y romperme completamente.

Noto que quiere llorar, sus ojos se desvían a la puerta y sé que quiere irse.

—Vete, no te quiero... Lárgate. —le suelto, quiero llorar en paz, quiero llorar y gritar al mismo tiempo y quiero estar sólo, cubro mis ojos para evitar que me vea tan destrozado.

Escucho un sollozo de su parte, por un segundo creo que se irá, en vez de eso, se acerca de nuevo hacia mí y me abraza con fuerza, le grito e intentó forcejear para que me suelte pero no lo hace.

Ese enano es muy fuerte para verse tan pequeño y frágil.

—Le prometí a Kook que te cuidaría, no voy a dejarte. —dice, casi gritando para que su voz se escuche sobre mis insultos—. JungKook volverá, Tae, te lo prometo... Es sólo unos días, por favor.

Dejó de forcejear, su tono es de pura súplica, una pequeña voz en mi interior dice que le dé una oportunidad, esa pequeña parte también dice que le crea.

—¿Dónde está él ahora? —pregunto, mi voz suena débil.

—Él... No está muy lejos, pero no puede salir, Tae, ni él ni tú. —murmura, me sigue abrazando—. Todo lo que quieras decirme yo se lo puedo comunicar, TaeTae, yo te escucharé en su lugar.

—¿Él está vivo, no? —digo, casi en susurros.

—Si, TaeTae. Él está bien, ahora está bien.

—¿Está aquí? —pregunto, de la misma forma que antes.

—Sí, TaeTae. —repite—. Me dijeron que no te dijera nada, podría lastimarte... Tae, no sé si debería hablar, no puedo decirte más nada.

—Si está vivo, eso es lo que más me importa. —murmuro, escondo el rostro en su hombro, hundiéndome en el abrazo.