Díada |KIRIBAKU WEEK 2020

[QUATRE] Gonna' Take My Pills And I'm Happy Again

•ａｄｖｅｒｔｅｎｃｉａｓ：mención de drogas, fin del mundo.

"Tomo mis pastillas y estoy feliz todo el tiempo. Amo a mi chica pero ella en realidad no vale su precio..."

El mundo era un lugar agradable para cualquiera.

Después de cientos de años de guerras las personas empezaron a evolucionar mucho más en el sentido del intelecto, con niños naciendo cada vez más inteligentes y un mundo cada vez más deseoso de paz, las generaciones nuevas empezaban a notar los errores de sus anteriores y mejoraban en todos los aspectos que se podían, trayendo así la Era de Diamante de toda la historia de la humanidad.

Cada país es un mundo pequeño, de hecho con el paso del tiempo los antes llamados países tercermundistas dejaron de existir, pues la educación fue un punto de partida de muchas naciones antes de empezar a surgir de alguna manera, creándose las primeras "escuelas de talento" en los que la gente estudiaba en lo que era bueno para poder ayudar al mundo. Nadie sabe exactamente como una realidad en crisis por la sobrepoblación, hambre, ignorancia y otras cosas más como enfermedades mortales anuales pudo salir de la inminente catástrofe tan rápido.

Como si fuera un milagro.

Los problemas antes realmente aterradores se empezaron a desvanecer, de repente habían encontrado métodos más efectivos para reemplazar al plástico y a diferentes objetos contaminadores, también la industria cárnica dejó de producir sus animales para hacerlo en cantidades más moderadas, por lo que después de un tiempo sin ciertos seres productores de dióxido de carbono el calentamiento global fue solo un mal sueño, la Tierra parecía empezar a curarse por sí sola.

Pero habían cosas que a veces no se podían controlar, como las enfermedades que venían a atacar a todo el mundo de manera constante, por lo que el Estado Mundial viendo que los nuevos virus empezaban a mutar en contra de toda vacuna creó pequeñas píldoras que cada ser humano tenía que tomar casi a diario para la prevención de cualquier agente extraño en su cuerpo.

Al mismo tiempo que la medicina avanzaba para confrontar estos enemigos pequeños se crearon dispositivos que la gente debía de usar en sus muñecas por toda su vida, para que pudieran saber si algo en su cuerpo andaba mal. Los gobiernos empezaron a casi regalar estos increíbles inventos, que asombrosamente fueron creados por jóvenes universitarios de medicina, tecnología médica e ingeniería robótica, estudiantes de las mejores universidades del mundo.

La población que empezaba a ser mucho más consciente de las cosas empezaba a tratar de incluir aquellos nuevos implementos en su vida cotidiana, aquellas píldoras se vendían muy baratas, los medios de comunicación alentaban a la compra de estas y su uso diario. De repente el mundo no podía imaginarse alguna comida sin estas píldoras de ingrediente o el caminar sin un aparato controlador en sus muñecas, pues se había vuelto un delito.

Delito con pena de muerte que absolutamente todos los países del mundo firmaron en un acuerdo, que se llamó "Tratado del nuevo mundo".

Después de tanto tiempo en guerras estúpidas la humanidad empezó a comprender y sentir más empatía por sus demás compañeros, con la educación gratuita completamente y la disminución de su sobrepoblación casi cualquier parte del mundo era un lugar agradable para vivir, pues de un momento a otro la tasa de delincuencia había bajado exponencialmente.