Mi linda B-29

Las primeras victimas

 Patrullando media hora y no había pasado nada la batería de Belle se acababa y al fin... un maldito malandro atemorizaba a una familia, los niños temerosos, el padre se veía como obrero y su esposa como cualquier otra madre trabajadora y desempeñada para hacer a su familia feliz

–Mira Snorlax, tenemos a uno –Snorlax abrió los ojos de tanto asombro

–Snorlax prepárate, apunta a la cabeza de ese bastardo –decía Artemis frunciendo el ceño

Por las cámaras se vio a ese tipo caer desplomado al suelo, la familia espantada miraba a Belle cubriéndose de que no les dispararan, los niños no temieron y se despidieron del avión solo lo que notaron ver fue una calcomanía de un ojo enojado.

A Belle se le acababa la batería tenían que aterrizar de todos modos. la aterrizaron en una calle desolada. Artemis y Snorlax fueron a buscar a Belle –lo bueno que le puse GPS –decía Artemis mientras le sonreía tiernamente a Snorlax.

Llegaron donde Belle descansaba y por casualidad la familia iba por ahí.

–Chamacos dejen ese artefacto ahí, no es suyo –decía el señor con voz firme, dirigiéndose a Artemis.

–Tranquilo, es mi aeronave, no se preocupe –dijo Artemis en cuclillas, sin voltear a ver al señor

– ¿Cómo sé que es tuyo?–

–yo lo fabriqué, y yo los salve de ese maleante –dijo Artemis con tono de seriedad.

Artemis sintió un pequeño abrazo era la niña de aquel buen hombre –¡¡ hija no!!–

Artemis se levantó y volteo a ver el rostro de agradecimiento de aquella familia, Snorlax estaba un poco asustado pero fue calmado al ver que la familia agradecía de todo corazón a Artemis la familia los abrazo y agradeció, de la mano de aquel hombre se notaban unos cuantos billetes –tome joven, como muestra de mi agradecimiento –

– ¡no! No puedo aceptarlo, estoy más que agradecido si no nos denuncia y lo estaré más si cuida muy bien a sus hijos –

Los niños veían la aeronave con asombro y la tocaban

–Niños dejen ahí –decía la madre con angustia.

–no se preocupe déjelos que vean a su salvador –

–De verdad muchas gracias –decía aquel hombre con una lágrima recorriéndole la mejilla mientras se despedía de Artemis y Snorlax

–Que dios los bendiga jóvenes –decía la madre.

–mira namas le dan bendiciones al ateo –decía Snorlax con tono burlón.

–Ya deja de bromear y mejor ayúdame a empacar a Belle –

Empacaron y regresaron a casa de Artemis

– ¿no gustas pasar? –

–no bro, me tengo que ir –

–p-pero tenemos que hablar, te veo un poco mal –

Los dos se metieron y pasaron a la sala

–Artemis, esto está mal –

–pero ¿no viste sus caras? ellos estaban agradecidos y en su rostro se reflejaba una calma –

–si we pero piensa, ya dejaste a una madre sin su hijo, un aniña sin padre –

– ¡NO ES MI PROBLEMA! ¿Para que escogieron ese camino? Teniendo manos, pies y los dos ojos pueden tener el trabajo que quieran, ¡pero no! solo buscan chingar a la gente honrada, honesta y trabajadora. Si ya no quieres participar lo entenderé –