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Ya habían pasado 4 días en Busan, era hora de volver a Seúl, las maletas ya estaban en el auto y lo único que faltaba dentro de este era el conductor y el copiloto, ninguno de los cuatro chicos que estaba dentro del auto conversaban, ni siquiera intentaban iniciar una conversación, las cosas se habían puesto un poco tensas desde que pasó el beso entre Chenle y Félix, no por que no gustarán del otro si no por lo que necesitaban aclarar sus pensamientos (y sentimientos), Taeyong y Seungmin se sentían bastantes incómodos así que se decidieron a hablar.

- bueno ¿Qué les pareció nuestro viaje? - pregunto Taeyong mientras miraba a casa chico.

- bien, fue desestresante - dijo Chenle sin despegar su mirada del retrovisor.

- ¿Y a ti Félix? - está vez pregunto Seungmin mientras miraba al pelilila.

- si, es lindo pero nada supera a las playas de Australia - Félix miro a Seungmin y forzó una leve sonrisa para después volver a hundirse en sus pensamientos.

- ¿Por qué elegiste rojo? - respondió a preguntar el mayor mirando al chino.

- es lindo y no lo sé, simplemente creo que lo elegí por eso .....

- y .... ¿Por qué no se hablan como pericos? - cuando Seungmin preguntó eso recibió un codazo por parte de Taeyong.

Chenle y Félix se miraron por unos segundos y no respondieron la pregunta, el silencio regresó al auto hasta que Chan y Woojin entraron y mientras tenían su recorrido por las carreteras para poder volver a Seúl, cantaban y se contaban chistes el uno al otro durante todo el camino, evitando así que el ambiente dentro del vehículo fuera incómodo.

Quizás pasaron horas desde que habían llegado a Seúl y cada quien estaba en su departamento, está vez necesitaban silencio y paz para sentirse mejor y pensar en alguna solución, pero ¿Solución para qué? Ni siquiera ellos saben por qué le giraban alrededor del asunto, la soledad dejo de ser su compañía desde hace tiempo, desde que Zhong y Lee se la pasaban juntos casi todas las horas y si eso no se podía se la pasaban hablando por teléfono. La soledad y el silencio infernal que inundaba los hogares de cada uno llegaron a desesperarlos así que valiéndoles una mierda llamaron al otro.

- Bueno ? - fue lo que respondió Chenle al otro lado del teléfono, parecía un tono neutro pero realmente estaba emocionado.

- Hola .... Bueno ....

- ¿Pasa algo?

- ¿Quieres ver una película? -   cuando Chenle escuchó la pregunta de Félix frunció leve el ceño, ya que el quería resolver ese asunto.

- deberíamos de arreglar las cosas en lugar de evitarlas - trato de hablar sin sonar grosero o molesto aunque eso hizo sentir mal sin motivo alguno a Félix.

- bueno, tienes razón ......

- ¿Quieres hablar de ello?

- No...

- ¿Por qué?

- por qué .... Ahg no lo sé, simplemente eh pensado en ello todo el tiempo, me gustó lo tengo por seguro, pero no sé cómo tomarlo, no sé si surgió por el momento, impulso o quién sabe que ... Pero no puedo sacarlo de mi mente tal vez solo necesito un tiempo ..

- ¿A qué te refieres? Quieres que dejemos de ser am ....

- Espera, primero escúchame - Habló rápidamente Félix interrumpiendo al pelirrojo, suspirando algo pesado y decidió seguir explicando antes de que el menor pensara en alguna tontería y este asunto terminará aún más peor de lo que estaba - a lo que voy es que no puedo pasar tiempo solo ya que me acostumbré a tu presencia, me acostumbré a tus llamadas y mensajes, a tus platicas de diversas cosas, a escuchar música contigo, comer, desayunar y cenar a tu lado ... y es que.. agh..... no se que es lo que sien............... 

𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐚𝐝𝐨𝐬? || 𝐂𝐡𝐞𝐧𝐥𝐢𝐱 || (Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora