Capítulo 30

70 7 7
                                    

Cuando Nayeon entró en la habitación se encontró a Somi medio escondida en un rincón, con sus brazos rodeando sus piernas y su cabeza baja, lamentándose por lo que había pasado tiempo atrás.

-Somi- llamó Nayeon acercándose a la nombrada. Somi levantó la cabeza, pero se arrepintió de dicha acción en cuanto vio quién se estaba aproxiando a ella.

-Nayeon  lo siento mucho, de verdad- Somi no pudo acabar la frase por culpa de su llanto, que volvió a despertar en cuanto vio la cara de la persona a la que había fallado.

-Somi no fue culpa tuya que me mandaran a ese asqueroso lugar- dijo Nayeon recordando aquel edificio antiguo y descuidado. -Ni tu ni yo sabíamos cómo iban a reaccionar mis padres. Lo que pasó fue la mejor decisión que tomé en mi vida, piensa que si no se lo contara, a lo mejor ahora mismo no estaría con Jeong.

-Estarías con ella igualmente, se nota que os queréis mucho. Sigo pensando que si no te hubiera sugerido aquello, no tendrías que haber estado en ese lugar-

*Flashback*

Nayeon estaba absorta en sus pensamientos mientras caminaba hacia su lugar de encuentro con sus amigas.

Hace poco se dio cuenta de que cuando sus amigas hablaban de chicos, ella no se sentía cómoda. No es que le tenga odio a los chicos, pero es que nunca sintió esa "atracción" de la que hablaban sus amigas hacia ellos, más bien sentía algo parecido con las chicas. Nayeon tampoco sabía muy bien por qué era diferente a las demás, ¿por qué a ella no le gustaba ningún chico?

Así que esa joven conejita, como otra adolescente cualquiera, buscó en Internet qué era lo que le pasaba.

"Que pasa si te gustan las chicas" fue lo que apareció en el buscador de la joven Nayeon.

Tras buscar en muchas páginas, que casi se lee el google entero, se dio cuenta de que no estaba mal ser lo que era, homosexual. También buscó información sobre el colectivo LGTBIQ+, para tener más conocimientos acerca de las personas que no eran "normales" según la sociedad.

De un momento a otro ya estaba en el parque donde se encontraban sus amigas.

-Hola- saludó Nayeon.

-Hola Nayeon- respondieron todas.

Estuvieron un buen rato hablando de cosas banales para pasar el tiempo hasta que llegó la hora de irse hacia sus casas y se despidieron todas. Pero antes de irse, Nayeon agarró a Somi del brazo, haciendo que esta volteara a verla.

-¿Qué pasa Nay?- preguntó Somi extrañada, ya que se acababan de despedir.

-Esto...Quería...- intentaba explicarse Nayeon muy nerviosa, no sabía cómo sacar este tema. -Quería hablar contigo- terminó la chica de dientes de conejo mientras se rascaba la nuca debido al nerviosismo.

-Vale, ¿de qué quieres hablar?- volvió a preguntar Somi confundida por el comportamiento de la mayor.

-Pues que...- Nayeon cogió todo el aire posible para seguir, esto no era tan fácil. -Creo que soy homosexual- acabó de decir mientras cerraba los ojos pensando que iba a recibir un golpe, cosa que nunca pasó. La más baja abrió los ojos para ver a su contraria, quien estaba con la boca muy abierta debido al impacto de la noticia. -¿Qué piensas?-

-Pues... No sé qué decir. A ver, esto no me lo esperaba. Pero si piensas que te voy a apartar de mi lado solo por ser feliz con alguien que la sociedad no cree "normal", te equivocas. Seremos solo unas niñas, pero tú eres libre de decidir a quién quieres y a quien no- respondió Somi sintiendo cómo recibía un abrazo por parte de la más baja. -Sabes que te quiero Nay, nunca te dejaría de lado, eres como una hermana para mí. Dime, ¿hay alguien que ronde por esa cabecita?- preguntó la más alta mientras señalaba la cabeza que estaba escondida en sus brazos.

Rewrite The Stars (Michaeng) (PAUSADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora