Simphony of Destruction

Isla Prisión

~6:20 en el centro de la isla~

Ambos erizos corrían a toda velocidad para llegar hasta el hangar. Shadow, quería escapar con su tesoro; Sonic lo impediría, no dejaría que por nada del mundo ese impostor se saliera con la suya.

—¡Me las pagarás por todo lo que has hecho!— se hizo a un lado, tratando de darle un golpe.

Shadow se hizo a un lado, aprovechando la fuerza del erizo para golpearlo y mandarlo al piso.

—Ja, ja, ja. Si bien que te gustó— se lanzó sobre él y estando apunto de caerle encima, Sonic le dió una fuerte patada.

Shadow salió volando lejos del agente, aprovechando esto el erizo corrió hasta el hangar, esperando poder adueñarse de la Esmeralda. Alcanzó a Eggman y vió que una chica murciélago llevaba la gema, corrió rápido y se la arrebató.

—Lo siento Cara huevo, pero no dejaré que se lleven esta gema.— mostró la gema con una gran sonrisa de burla.

—¡Maldita rata azul!— shadow llegó a ese sitio, observando al erizo.

—Así que me ganaste, ¡Felicidades!, Pero no dejaré que te marches con esa Esmeralda— una nueva pelea había comenzado.

El ceruleo atacaba con todas sus fuerzas al azabache, peleaban por obtener la gema y el tiempo se les acababa, la isla estaba por hacer explosión. Ambos estaban forcejeando, mirándose con rabia, ninguno de los dos parecía que cedería.

—¡Shadow, la isla está por explotar, o te apuras o te quedas!— gritaba Eggman muy histérico, entrando a su máquina voladora.

—Creo que ya debo irme— halo sus manos hacia atrás atrayéndolo hacía el y besándolo.— Tengo que tomar ese vuelo—

Shadow desapareció en un abrir y cerrar de ojos, confundido trató de ver a dónde se había ido, hasta que vió la avioneta de Eggman pasar por encima de él.

—¿Tails, dónde estás?— corría hasta el otro extremo de la isla—

—¡Te dije que la isla estaba por explotar!— gritaba molesto por el comunicador— Mi avión quedó en muy mal estado, pero gracias al Teniente Coronel, estoy bien—

—¿Cómo Knuckles, está contigo!— ya había llegado a la entrada de la isla, una escalera le fué arrojada y subió en ella, logrando salvarse por nada de la explicación—

—Teniente Coronel Knuckles, para usted Agente Sonic. Tengo entendido que dejo ir al Dr. Eggman y sus compinches— agregó molesto, acercandose al erizo, quién apenas subía de la escalera—

—Si, digo no. ¡Tengo la  Esmeralda!— de entre sus púas sacó la esmeralda— Solo me arrepiento de no haberle podido quitar la Esmeralda que ese impostor carga consigo— cerró el puño con frustración y molestia—

— Así que no solo dejaste ir a Eggman, si no que, se llevó una Esmeralda “Bravo Agente”, apuesto que este le hará mérito a qué lo asciendan por su gran hazaña— aplaudía lento en señal de sarcasmo—

—¡Tú ni siquiera estuviste aquí! Tails y yo nos tuvimos que hacer cargo, eran tres para nosotros dos, bien nos pudo servir tu ayuda y ¿Dónde estabas?— se cruzó de brazos mirando molesto al equidna—

—Yo... Atendía un robo, que perpetuo una vieja rival— desvió la mirada—

—Se refiere a la Esmeralda Maestra que robó Rouge— soltó el prodigio, delatando al equidna—