♥Utilizado por Placer♂ (AllxJin)

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En el sombrío callejón daba la bienvenida una puerta de metal, lucecitas de colores salían de los huequecillos. La sombra de 7 personas se hacía presente en el lugar sombrío, una de las sombras se adelantó, el propietario de respectiva sombra se acercó a la pálida puerta de hierro. El toque de la mano delgada fue delicado. Una rejilla fue abierta, colocada en dirección a los ojos, la persona que se encontraba al interior del lugar observo a las personas presentes en frente de la puerta, cerro la rejilla y procedió en abrir la puerta.

–Les está esperando la encargada – hablo un hombre alto con porte fornido.

–Sera mucho gusto conocerla – contesto un hombre ancho de cuerpo.

El hombre de traje camino enfrente de todos los presentes y les pidió que le siguieran. El camino hasta los asientos era muy bullicioso, la música a tope. Los jóvenes podían observar distintas mesas alrededor de una pista, en las esquinas habitaban los sofás rojos cubriéndolos encima de estos una tela crema, para más privacidad y mayor comodidad de los huéspedes.

–Todo este lugar está lleno de chicas y chicos que llevan poca ropa – comento uno de los jóvenes.

–Silencio Park – ordeno el señor de postura ancha.

–Ven – lo llamó en voz baja su compañero, se acercó a su amigo reprendido y le susurro – no comentes nada hasta llegar al lugar tonto.

El camino se hacía cada vez más pesado. Los chicos tenían las mejillas bañadas del rojo sangre, la vergüenza se presentaba acompañada de pensamientos impuros. El joven que encaminaba al grupo se detuvo, llamo al mayor del grupo, le susurro algo al oído, el contrario dio una risita satisfactoria. Los jóvenes se miraban ansiosos querían saber que sorpresa recibirían.

–Chicos acérquense – el señor dio un gesto con la mano y los 6 jóvenes acataron la orden.

Al entrar todos al salón pudieron observar a una señora sentaba en el centro de la mesa, claro que estaba escoltada por dos hombres. El señor se sentó en la silla sobrante en el lugar, los demás que lo acompañaban rodearon la mesa.

–Hablemos de números Jin-Kyung – cruzado de brazos rompió el hielo.

–Claro señor Bang Si-hyuk – contesto sonriente.

–El número que le propuse no sé si la dejo satisfecha.

–Señor Bang Si-hyuk la cantidad que vale ese joven aquí es superior a lo que me propuso, ese muchachito lo ganaría en un par de días – con aires de superioridad contesto.

–Le subiré la propuesta al triple, usted no lo puede negar – tomando la bebida colocada en la mesa contraataco – además su padre lo solicita y si usted rechaza lo propuesto igual se lo quitaremos y usted se quedara sin nada – la miro seriamente – sé que usted no quiere eso.

–Acepto su propuesta. Ganó señor Bang Si-hyuk – parándose de su asiento habló – pero creo que ese muchacho no se merece esto – terminando lo que quería decir se retiró.

Jin-Kyung cerró la puerta al terminar de salir del salón, ella pudo observar su gran lugar llego de clientes y sus empleados atendiendo a estos. El remordimiento le carcomía su ser, además ella no podía hacer nada al respecto, al fin y al cabo todo era dinero para su ser, no tenía que preocuparse por un niño.

–Alisten a Kim SeokJin – ordeno demandante.