EPISODIO IX

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EPISODIO IX

Bajamos a la primera planta, para ir a la cafetería. Pedimos nuestra orden y esperábamos pacientes a que nos llamaran. Yo seguí nervioso por saber a dónde me habían cambiado --"¿Por qué el cambio?"-- seguía absorto en mis pensamientos buscando una idea clara el porqué del cambio. No era una persona experimentada, ni con experiencia laboral. --"¿Por qué yo?"-- hasta que escuché a la mujer llamarme

--Perdón estuve perdido en mis pensamientos-- me disculpe, la mujer me contesto que no me preocupara.

--Jin, ¿puedo llamarte así?-- preguntó a lo cual yo asentí

--Sí claro-- dije sonriendo

--Jin, el lugar donde vas a trabajar, es muy tranquilo, el Doctor Kim es muy bueno-- dijo moviendo su cabeza un poco --Bueno, un poco temperamental, necio y adicto al trabajo. Y eso es lo que vas a cuidar, qué él trabaje pero que no se exceda-- yo estaba atento a toda su explicación

--Él es un buen hombre. Pero un poco terco-- dijo sonriendo --Tú te vas a encargar de que nadie entre en su oficina, nadie por ningún motivo tiene acceso a esa oficina, salvo tú. Aunque sea un ambiente laboral muy tranquilo, él está rodeado de gente que quiere tener provecho de él. Así que tú como primera valla de contención, jamás deberás dejar entrar a nadie, siempre pedir preguntar si él quiere ver a alguien, no dar información de él, ni dejar a la vista tu agenda ni los documentos que manejamos ahí-- dijo seria

Yo asentí--Sí entiendo-- dije sintiendo una gran responsabilidad en los hombros

--Jin. Hoy sales a las dos, y toda esta semana vas a salir a esa hora, pero a partir del lunes tu hora de salida cambiará a las 8 de la noche-- me explicó seria

Yo sentí morir ¿Ahora que iba a hacer? ¡Desiré sale a las 3 y media! No podía simplemente renunciar, pero como iba a hacerle para ir por mi hija, Obvio no podía contar que tenía una hija, por qué sabrán que mentí u omití información. Dios mis manos comenzaron a temblar

--¿Jin? ¿Todo está bien?-- preguntó observando mi cambio de expresión --No te preocupes tienes una hora y media de comida o luego hay veces que el Director te da permiso de ausentarte 2 horas a lo mucho-- me contaba feliz

Yo sólo sonreí fingidamente, pues no sabía cómo tomar esa noticia. Primero estaba mi hija, por su puesto pero debería haber una solución.

Horas más Tarde

Realmente me había caído muy bien Anna, era una mujer muy proactiva, inteligente y suspicaz. Tenía mucho que aprender de ella, lo bueno es que ella me había explicado que tenía todo un mes para enseñarme el manejo de la oficina, y a pesar de que estuvimos todo el día frente al escritorio. Jamás llego el Director Kim. Así que tal vez lo conoceré mañana. Anna me acompaño a la oficina para sacar mis cosas, pues todavía era nuevo

--Cariño hasta hoy yo te abriré la oficina, pero mañana tu solo entrarás-- señaló --Toma cariño-- me alzó su mano dejándome ver un juego de llaves, yo me quedé estático --"¡Dios!"-- alce lentamente la mano

--Cariño, ahora tú serás el secretario del Director Kim-- vi que la mujer me sonreía ampliamente, entregándome su trabajo que hizo por años, ahora era mío. Sentí una fuerte responsabilidad en mis hombros, pero también orgullo por ser escogido para este cargo

Tomé las llaves. Tomé mi bolso, y salimos de la oficina, nos despedimos de un abrazo, deseándome buen camino la mujer. Y salí de ahí.

Mi cabeza daba muchas vueltas, tenía el problema del horario, pero también la responsabilidad del cargo. Fui a checar mi salida, a cambiar mi uniforme. Y me encaminé para bajar al subterráneo.

Unos minutos después

Entré por el pasillo --Anna, ¿cómo salió todo?-- abrí la puerta de mi oficina

--Todo en orden Director Kim-- se escuchó a mis espaldas

--¿Le explicaste todo?-- dije

--Claro que sí. Él es un chico muy inteligente, lo va a hacer estupendo-- dijo sonriente --Sólo hay dos cosas que quiero que esté enterado. Él se preocupó por su hora de salida, a lo mejor tomó el puesto anterior por el horario, y hoy le afecta el cambio. Segundo es un chico aún sensible y noble, tendremos que enseñarle a ser de carácter fuerte para que no quieran sobre pasarlo-- acomodó sus anteojos --De ahí en fuera todo está bien, aprende rápido-- añadió

Yo ensanche mi sonrisa. Estaba más que feliz e impaciente de estar con él, en la misma habitación.

--Perfecto-- dije y cambié mi bata para colocármela y tomar asiento --Dame los pendientes-- pronuncié y la mujer salió por la puerta

Me recargue en el respaldo de la silla de mi oficina. Mi corazón latía a mil por la emoción. Aunque también por la expectativa de que podría pasar en adelante. Pero yo era un hombre sumamente paciente cuando se trata de algo interesante

Cuando me quedé pensando el por qué le había parecido preocupante el cambio de horario --"¿Trabajará en algún otro lado o estudiará?"-- pensaba mientras esperaba que llegará Anna con los documentos

Tenía que investigar eso. Por qué yo tomé una decisión arbitraria a pedir su cambio, sin saber las razones de su ingreso al trabajo.

--¿Qué ocurrirá para que le preocupe el horario?-- dije en un murmuro cuando escuché el abrir de la puerta colándose el sonido de unos stilletos, giré mi silla hacía la entrada --Sigues sin pedir permiso antes de entrar. Y sigue permitiéndotelo Anna-- dije sonriendo en una mueca

--Claro Nam. Yo la contraté-- decía mi tía entrando en la oficina posándose frente a mí --Así que nuevo secretario-- decía maliciosa yo rodé los ojos

--¡Anna...!-- alcé la voz con un poco de molestia cargada en mi voz

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