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¿Qué hacía nuestro pequeño Seungmin a media noche despierto?

Pensando en todo mientras miraba las estrellas.

Tal vez fue allí cuando su insomnio comenzó, no lo recuerda exactamente.

Por su mente pasaban muchas cosas, como por ejemplo...

Las hadas.

¿Eran reales? Seungmin tenía la teoría de que habían pequeñas personitas voladoras que vivían entre nosotros.

Y que afortunadas eran, tal vez ellas no sufrían tanto como las personas lo hacían.

Seungmin pasó de hadas a helados, de helados a su mamá, de su mamá a su padre...

Su padre era malo, pero solo lo era con él. ¿Por qué? No lo sabía. Había escuchado algunas veces a su madre hablar por teléfono mientras decía que su padre era realmente malo...

¿Con quién hablaba? Posiblemente con su hermana o su familia.

Seungmin no podía confiar en nadie que no fuera su madre o su psicóloga. Eso lo tenía claro, ambas le decían que fuera habían personas malas que querrían hacerle daño.

Su padre era una de ellas.

Sus hermanos...¿Eran malos? Ese era un tema confuso para nuestro Seungmin, ellos jamás le habían dicho algo malo o hiriente, sin embargo lo ignoraban todo el tiempo, y a veces eso hacía llorar a Seungmin.

Si alguien hace llorar a otra persona, ¿Es malo? Si la respuesta es sí, entonces sus hermanos eran malos también.

Su madre nunca lo había echo llorar, tampoco su psicóloga...

Su psicóloga...ella era...

Una mujer algo mayor, tenía el cabello blanco y unos ojos verdes muy lindos. Era muy simpática, tierna y amable. Le regalaba cosas a Seungmin cada vez que podía. A veces dibujaban juntos, otras veces cantaban, una vez bailaron igual...

Seungmin la quería, era lindo pasar tiempo con ella.

Le había enseñado muchas cosas, como por ejemplo que la venganza es mala, que la justicia llega a su momento adecuado y lo único que nos queda es pedir el bien para quien nos hace el mal. Ella le enseño a no tener rencor ni odio hacia nadie, sin importar lo que hiciera. Ella dijo que el odio era un sentimiento horrible y muy fuerte, que poco a poco nos va matando.

Así que Seungmin seguía sus consejos, no guardaba odio ni rencor hacia nadie.

Ella también dijo que siempre debíamos agradecer, por un plato de comida, por una prenda de ropa, por un nuevo día. Por que no todos tienen esa suerte.

La mayor parte de las cosas que Seungmin sabía eran gracias a ella.

Ella le grabó en la mente que ser amable y tierno con todos traía buenos resultados, aún si no todos lo merecían.

Y eso era Seungmin, amable y tierno...aún a su corta edad, sabía perfectamente lo que debía y no hacer o decir...

The Little SeungminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora