Llevaba observándolo meses, veía como se sentaba lejos de todos mientras comía bocadillos y antes de terminar el descanso, iba directo al baño, no sabía porque pero suponía que era un hábito en el, aunque no tiene que pensar en porque es raro, el podía hacer lo que quiera; pero había algo que le decía que aquello no era siquiera normal, lo esperaba en el pasillo un poco lejos del baño, observaba que cuando salía, él lucía más pálido de lo normal, era por eso que pensaba que no era normal.
Después de tanto pensar, solo decidió seguirlo y descubrir que era lo que pasaba con aquel chico.
Despertó temprano esa mañana, se ducho y se colocó el uniforme, salió dirigiéndose a su pequeña cocina, hizo su desayuno y mientras saboreaba el pan tostado con jalea que se había hecho, pensó ¿que hará Jungwoo en el baño?¿Porqué se ve tan mal? No tenía porque preocuparse tanto, a lo mejor solo era su instinto en querer protegerlo, desde hacía casi un año que estaba enamorado de él, pero Jungwoo siempre demostró miedo cuando se le acercaba y otras personas era lo mismo.
Jungwoo se mantenía alejado de todos, no quería que le dijeran aquellas cosas que le gritaban cuando estaba en la secundaria, pero para su sorpresa y algo que no sabía, era que a todos en la preparatoria el niño introvertido, era muy popular entre las chicas, incluso chicos, uno de ellos nada más y nada menos que Lucas.
Llevaba enamorado de él desde la primaria, pero el nunca lo vio o se dio cuanta de su presencia, aquel lucas de 10 años era tan distraído como para darse cuenta de lo que pasaba a su al rededor, pero un día simplemente dejó de ir a la escuela y Jungwoo lo extrañaba tanto que empezó a dejar de comer y si lo hacía lo regresaba inmediatamente. Así siguió hasta ahora, Lucas había regresado, ambos estaban en la misma preparatoria.
Jungwoo creía que Lucas seguía ignorandolo por completo o a lo mejor ni siquiera lo reconocía, eso lo tenía tan inmerso en sus pensamientos que no se daba cuenta como Lucas lo observaba de lejos, algunas veces se le intentó acercar pero el lo ignoró.
Cuando lo vio entrar por la puerta de la cafetería, dejó de comer, no quería que le dijera que era un maldito gordo, todos le decían eso en la secundaria, cuando tenía una pérdida de peso o este se elevaba drásticamente, y sus compañeros lo atormentaban con eso, así que se quedó con aquel miedo. Decidió ignorar la presencia de Lucas ahí, y siguió comiendo pero ahora de a poco, y cuando "acabo" de comer se levantó y se dirigió directo al baño, no quería que todo lo que acababa de comer subiera su bajo peso.
Lucas.
Vi como se levantó, sabía a dónde iba, quería ver que hacía en los baños; lo seguí yendo lento, no quería que se diera cuenta que iba a donde él, esperé un poco fuera del baño y decidí ingresar segundos después, solo escuché algunas arcadas y vi por el espacio que había de la puerta del cubículo al suelo los pies de Jungwoo, estaba hincado, estaba vomitando.
No pude evitar preocuparme un poco, cuando vi que salió del baño, me sacó de mi shock, me vio y se limpió la boca rápido, como si estuviera asustado, empezó a sudar demasiado y me le acerqué un poco, le temblaron las manos, y me asusté por ello, estaba entrando en pánico.
"No me vayas a decir nada, ni le digas a nadie"- dijo llorando, el tenía miedo.
"Quiero ayud-"- y ahí se quedaron mis palabras cuando lo vi desplomarse en el piso, me asusté tanto, pero por suerte reaccioné y lo cargué en brazos saliendo del ahí y dirigiendome a la enfermería, para mi suerte todos ya estaban en clases, si me veían con un pálido Jungwoo en brazos e inconsciente, harían un escándalo, era lo que menos quería.
Mientras lo veía recostado en aquella camilla que tenían en la enfermería pensaba en si Jungwoo tenía ese problema desde hace mucho, ¿tiene anemia? La pregunta lo ponía nervioso, no quería que Jungwoo sufriera eso, no tenía porque meterse, pero no podía evitar preocuparse.
