Narración Omnisciente
Aquella melodía provenía salir de una delicada y suave voz de una mujer, el cual aquel demonio solo intento ver de quien era, puesto a que no era muy común en escuchar una voz tan dulce por esta ciudad, ya que siempre las oía por mediante de radios, o hasta la televisión, por lo que al principio pensó en eso.
Bill-. ¿Una artista nueva? ¿Quién será?- pensó que se encontraba en una televisión era muy normal, puesto a que casi todos los cantantes se encuentran lejos de esta ciudad.
Pero para su sorpresa no era en una televisión, porque entre más se acercaba, más claramente se oía, y parecía más real, de lo que estaba pensando, así que sonrió de lado, puesto a que a lo mejor encontró a su siguiente víctima, pero todos esto era muy fuera de lo común, pues el demonio hace tiempo no se encontraba con una emoción, al ver de quien se encontraba esa persona.
Pero todo fue a lo peor, al ver en donde se encontraba aquella voz, y era en una escuela, tanto que odia a los niños, para saber que aquella voz es solamente una niña, sus expectativas fueron disminuyendo poco a poco, mientras que intentaba mantenerse con un ánimo, todo lo que estaba por suceder a lo mejor iba a sacar una gran sonrisa demás.
Bill-. Ahora mismo, me encontrare con otra niña, esto es más que obvio, por lo cual sé que me va a destruir mis expectativas – solamente se cruzó de brazos al observar detenidamente la escuela, aunque algo le llamo la atención.
Alguien estaba en la escuela, cuando todos los demás estaban de vacaciones.
Algo en el al pensarlo, empezó a dudar en lo que realmente estaba pasando, por lo que es un gran misterio para él, saber quién se encontraba en la escuela, por lo que solamente con su único ojo casi cerrándolo, formando una medio circulo, por lo que para el significaba que estaba contento, era como una sonrisa en los ojos.
Bill-. Vemos quien es – al llegar a donde por fin provenía el sonido, era en una chancha, por lo cual, la razón por el eco que había antes.
Pero algo muy raro paso, puesto a que no veía a nadie, a primera vista, solo oía aquella canción en aquel lugar vacío, o es lo que pensaba, no estaba ninguna chica ahí en el medio de aquella cancha, cantando una hermosa melodía, por lo cual solamente se preocupó un poco aquel demonio.
¿Acaso sus oídos lo habían traicionado?
Pero aun escuchaba la voz, por lo que solo miro a los lados, pero no había nadie, empezó a irse al medio de la cancha, a lo mejor era un duende, tan pequeño que no lo había visto, pero era algo imposible, los duendes no le gustan estos lugares eran grandes, o eso le habían dicho.
Ahora mismo el demonio, más que curioso, estaba extrañado, hace tiempo no se sentía impresionado, al no encontrar nada.
Bill-. Esto si es raro... - Por suerte estaba aún en una ilusión, por lo que nadie lo iba a encontrar, pero, así como a él nunca lo iba a encontrar.
Aquella voz nunca la iba a ver.
Bill-. Primero que nada, siento que esto es más que una broma, pero no veo alguna bocina, o algún radio, sé que es de alguien, sé que alguien está aquí pero no aparece – empezó a irse por aquellas gradas, a lo mejor esta acostada con un camuflaje perfecto.
Pero tampoco había nada.
Pero mientras que se acercaba por lo que era al parecer, algún cuarto, se escuchaba más fuerte, un cuarto pequeño, que, pero aun así la voz salía potente, por lo que solamente sonrió al saber que por fin había encontrado en donde provenía la voz.
Bill-. Y ahora veremos de quien se trata - así que entro aquel cuarto, parecía que era de limpieza, por lo que a él le resultó extraño, y se había quedado asombrado.
Ahí estaba la chica, tenía los audífonos puestos, y estaba de espaldas, por lo que lograba ver el cabello de un color castaño, para Bill, le parece extraño que alguien estuviera ahí, pero lo más extraño, es que ya estaba cerca de ella, no oía la canción fuerte.
Era solo un tarareo bajo.
Bill-. ¿Qué es lo que pasa?... Yo te Oía hasta fuera de la escuela, como es esto posible... - claramente hablaba, porque sabía que no iba a ser escuchado, así que no le importo volar al alrededor de la chica.
empezó a ver su rostro, era como de alguien normal, no tenía ninguna característica que la hacía ver diferente, nariz pequeña tez blanquiza, y ojos de color miel, para Bill, ni siquiera podia entender el por que la escuchaba tan alto, mirando a la chica al aprecia que estaba concentrada en solo limpiar una estantería.
Bill-. Eres normal, solo eres una humana.... Pensé que seria diferente... - Se había desanimado, puesto a que pensaba que iba a ser diferente esta vez.
Quería irse ya a buscar a otra persona, pero aun así se quedaba oyendo la canción, era raro en él, que ni su propia mente lo entendía, sin darse cuanta seguía mirándola, pensando que aun era normal la chica, que no tenia nada interesante, casi gritándole que era la mas aburrida de toda la ciudad.
Pero aun así se le quedaba viendo.
Después de unos minutos viendo la chica solo limpiando, ella por fin había salido de aquel cuarto, aunque fue primero por su mochila, quien estaba escondida en una caja, al parecer esto es lo único extraño que se le hizo a Bill, cuando se fue del cuarto, al parecer ella solo miraba a los lados, pensando que había alguien más ahí.
Bill-. No hay nadie, nadie te estaba escuchando cantar, bueno solo yo, pero no te lo voy a decir – soltó unas carcajadas, mientras que la seguía a todos lados, aun la seguía después que le había dicho que era aburrida.
Por fin se fueron... Ya no me van a golpear de nuevo...
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