"Do it again"

Ahora vienen los cuernos

(◡‿◡✿)╰(✿'⌣'✿)╯(✿◡‿◡)

Un domingo bonito en el que los rayos del sol iluminaban los árboles que ya estaban sin hojas, los niños corrían de un lado a otro jugando mientras que sus padres los vigilaban desde la lejanía. Sí, un hermoso domingo en familia casi perfecto...casi porque un par de chicos estaban dándose de golpes y lejos de separarlos, sucedía todo lo contrario, se había formado un circulo de adolescentes a su alrededor que los impulsaban a seguir en pie de combate.

-¡¡Hijo de tu puta madre!! ¡¡¿A ti quien putas te dijo que puedas tratarme como tu puta barata?!!-El siguiente golpe era dado en el rostro de ese morenazo.

-¡¡¿Que mierda te sucede?!! ¡¡No decías lo mismo cuando estabas gimiendo debajo de mí!!-Las cosas se ponían interesantes.

Por lo que alcanzaban a escuchar los ahí presentes, ese par de chicos al parecer tenían una pelea del tipo romántico y ninguno daba su brazo a torcer.

-¿Ah? ¡¡Ni siquiera te despiste de mí, bastardo suicida de mierda!!-Jean daba un golpe más pero en esta ocasión Eren lo detenía antes de que se impactara de lleno en su rostro mal herido.

-¡¡Eso no implica que te vayas y te abras de piernas para alguien más que no sea yo!!-Y respondió dando un golpe en el rostro de ese condenado ojimiel-¡¡Tu culo es mío y ya te dije que no me gusta compartir!!

El repentino golpe saco de balance el cuerpo de Jean y este cayó al suelo seguido de Eren que ahora estaba por darle otro golpe más pero el ojimiel hizo su cabeza a un lado de modo que el puño derecho de Eren se impactó contra el suelo.

-¡¡Mierda, Eren!! ¡¡Estamos armando un puto escandalo cerca de donde trabajo!!-Fue en ese momento que Jean se dio cuenta de que no solo había varios jonecitos a su alrededor que los incitaban a seguir peleando sino que los grababan.

-¡¡Joder!! ¡¡Es tu puta culpa por no haberme esperado!! ¡¡Maldita yegua del mal!!-Eren estaba muy enfadado.

-¡¡No dijiste que ibas a regresar!! ¡¡Si pensaste que me iba a quedar a esperarte como una vil monja de convento estas muy equivocado, papacito!!-Jean tomo impulso con sus pies y dio un golpe en el abdomen de Eren.

-¡¡Puta madre, en serio que pegas como una pinche yegua!!-Ahora Eren estaba de espalda contra el suelo.

Se enderezo un poco y vio que Jean se ponía de pie, acercándose hasta donde estaba para darle una mano.

El pelicastaño tomo la mano que se le daba y se puso de pie, dándose cuenta de que no estaban solos.

-¡¡Y USTEDES QUE MIERDA VEN, BOLA DE NINIS!!-Eren les lanzaba una feroz mirada.

-¡¡QUE NUNCA HAN VISTO A UN PAR DE MARICAS PELEARSE!!-Eren se acercó a Jean y coloco su brazo derecho alrededor del ojimiel.

Mientras que este colocaba su brazo izquierdo en los hombros de Eren mirando de manera aterradora a los chiquillos esos que simplemente salieron despavoridos.

-¿En tu casa o en mi casa?-Decía Eren a su lindo ojimel.

-Sorpréndeme, Jaeger bastardo-Y ambos caminaron rumbo a la estación.

Las personas que los miraban se les quedaban viendo pero lo hacían de forma disimulada pues ese par de chicos tenían unas miradas por demás aterradoras.

Eren llevo a Jean hasta su hogar que era una casa sencilla, sin sobresalir de las demás simplemente un lugar común y corriente.

-Ahora si yegua del mal, le buscaste al toro y ahora vienen los cuernos-Estando en su hogar, Eren dejo salir todo el coraje contenido que aun tenia.