No sé porqué tengo esos sueños raros, y no son sueños en donde aparento ser una loba, y mucho menos vampiros, sólo sueño con Ángeles...
❌PROHIBIDA CUALQUIER COPIA O ADAPTACIÓN SIN PERMISO DEL AUTOR
Y hay estaba yo, de nuevo en aquel vacío de nuevo, con esa cosa extraña saliendo de mi espalda en vuelto en sangre, y ese ardor, seguía apareciendo en cada sueño que tenía, solo sentía las lágrimas bajar, y escuchaba una voz que decía: "Tu puedes ser algo más que una loba, o una humana"
Al escuchar eso, sólo desperté y me levanté de prisa, llamando la atencion de todas las enfermeras. Les pregunté que cuánto tiempo había estado dormida, y me respondieron que en el transcurso de los cuarenta minutos que estuve dormida, la rubia estaba en el despacho del director ¿¡Enserio, cuarenta minutos?! Para mi eso fué una eternidad.
Al salir de quel lugar me encaminé al despacho de director, al entrar ví la sonrisa de la rubia, era una inocente, pero sus ojos reflejaban odio y ira hacia mi persona. El director nos dió una charla de diez minutos, y luego me dió mi horario. Me encaminé hacia mi taquilla viendo que sólo faltaban cinco minutos para mi clase, así que apresuré el paso. Al llegar, abrí la taquilla, y tenía muchos libros de clases y más cosas necesarias para las clases; pegué el horario en la puerta de la parte de adentro de la taquilla y dejé muchas cosas innecesarias, entre ellas, mi bolso, libros de lecturas interesantes y más. Tomé varias cosas para mi clase de Matemática, subí a la segunda planta y giré la perilla un poco insegura.
Caminé lo más rápido posible hacia un puesto vacío de los últimos al lado de la ventana. La verdad, nadie se me quedo mirando...¡Bien, todos me miraron como si fuera una distinta especie peligrosa! Bueno, para ellos soy una disitinta especie, pero peligrosa, no lo creo.
-Buenos días alumnos- Dijo una hermosa mujer con una sonrisa radiante y ojos brillosos de felicidad, era una mujer con cabellera castaña clara y ojos color avellana- Veo que tenemos una nueva alumna, ¿puedes decirnos como te llamas cariño?- Dijo la hermosa mujer que aparenta unos cuarenta años, pero igual sigue siendo hermosa.
-M-me llamo Abby Owen, y tengo catorce años- Dije un poco nerviosa, ya que muchos se me quedaron mirando. La hermosa mujer asintió y yo me senté junto con los demás que ya se habían sentado.
-Te faltó "Y soy una humana"- Dijo una de las chicas que acompañaban a la rubia en el momento de mi sufrimiento.
La profesora la miró con una sonrisa, y luego me miró con unos ojos brillosos ante tanta felicidad. La verdad no se si es una sonrisa mala, o buena, pero por su cara, creo que es buena. Esta profesora es de las mejores que he tenido, es amable, con mucho conocimiento, dulce, cariñosa, y ni se diga de su cabello, es liso, le llega hasta los hombros y siempre parece que le regala una sonrisa a todo el mundo.
