DEL CIELO PARA PROTEGERTE 💎💙

Capitulo 2

Llegamos a nuestro infierno y Ness se aparca en el lugar que encuentra más libre, salgo del coche al mismo tiempo que el, nos dirigimos hacía el pasillo, no hay mucha gente por tal razón podemos ver a una Leyla sonriente nada más llegar.

— ¡Hey nenes! —grita Leyla— ¿Por qué tan temprano el último día de clases del primer semestre?.

Esto de "nene" es nuestro apodo de amigos que usamos para llamarnos siempre, ya que nos conocemos desde pequeños, Leyla fue la última que se íntegro cuando estábamos en 4to de primaria, y desde entonces somos inseparables, de pequeños Leyla y Ness decían que se casarían y yo sería la madrina " cosas de niños " pero ahora las cosas son diferentes somos más maduros según nosotros, pero seguimos teniendo el cerebro lleno de mierda.

— Tu también llegaste temprano hoy —le digo sonriendo y dándole un pequeño beso en la mejilla como saludo.

— ¿Que tal si las veo después? —dice Ness volviendo hacía la salida.

— ¿Pero a dónde vas? —le dice Leyla caminando hacia el y yo siguiéndole el paso.

— A dónde sea, la primera materia es física y yo no pienso cogerla - dice haciendo una mueca.

— Pero nene tú no te gobiernas —le digo pareciendo seria.

— Ya lo sé —me dice sonriendo— ¡nos vemos nenas! —se va rápidamente haciendo ademán de adiós.

— ¡Deja que nos volvamos a ver! —le grita Leyla.

Nos quedamos viéndolo alejarse hasta subirse a su auto e irse, minutos después sonó el timbre y fuimos a clases, después a otra clase, a otra, y otra, hasta que por fin llegó el descanso.

— Oye ¿Va todo bien en casa? —me dice Leyla de repente.

— Si... —le digo sin entender.

— Es que ya sabes solo están tu y tu mamá entonces ... —me va diciendo un poco nerviosa.

— Está todo bien —la interrumpo— está bien, ya no hablemos de eso, mejor vamos a comer algo para que mi mamá no me mate.

Me sonríe y asiente.

Desde que mi padre desapareció tanto Leyla como Ness se han preocupado mucho por mi, aún que no hablamos mucho del tema pero ambos saben que mi madre y yo desde hace meses nos estamos recuperando poco a poco, si no me equivoco lleva 6 meses desaparecido. Ya no tenemos esperanza de encontrarlo y más que mi madre y yo tenemos sospechas de por qué desapareció.

Después de comer el día paso bastante rápido, aunque las clases no dejaron de ser aburridas, ya había sonado el timbre de salida y estaba recogiendo mis cosas, siempre me quedaba de última recogiendo, parecía una tortuga a la hora de recoger.

— Muévete o te dejo  —dice Leyla que está a mi lado atacando me para que me apresure.

— ¡Ya está! Vámonos —le digo caminado hacia la salida del aula.

— Oye, Ness no vino a segunda hora, ni nunca  —me dice Leyla con cara de preocupación.

— Déjalo Leyla, sabes cómo es —le digo sin preocupación alguna— ¡nos vemos nena!  —le sonrió y me dirijo hacia la salida para irme a casa, nunca nos vamos juntas ya que su padrastro la viene a buscar siempre y nuestras casas no quedan nada cerca, siempre me voy con Ness, pero este no esta, así que me toca irme sola. Camino sin prestar atención a la calle, mi casa no queda lejos, pero tampoco cerca, pero ya estoy acostumbrada a días eventuales como este.

Llego a casa desesperada por un baño y poder dormir, no soy de dormir por las tardes pero esto ya es necesario, me siento agotada, creo que me estoy enfermando. Entro silenciosamente, no me gusta hacer ruido, o mejor no me gusta encontrarme a mamá, es muy intensa. Me percato de que la casa está vacía, vacía en el contexto de que no hay nadie, me pregunto a dónde se pudo ir mamá, veo una nota de lejos en el refrigerador y me acerco para poder leerla, llegaré tarde, mamá , no deja detalles de dónde esta, es raro casi no sale, pero bueno estos son de los pocos días eventuales en mi vida.