Déjame Morderte

1. Prólogo

     El sonar de una Alarma la despertaría  de su sueño de belleza de 8 horas para luego ir por su compacto cuarto hasta su baño y al verse en este, su rostro se reflejaria lúcidamente. Su cabello era de color castaño y sus ojos de igual manera, mientras se cepillaba sus dientes estando somnolienta y sus ojos entre cerrados casi al punto de quedarse dormida en plena acción. Al terminar de limpiarse sus dientes de forma diligente y delicada, tomaría su peine y empezaría a cepillarse su gran y lacio pelo con movimientos circulares largos y de manera suave, como si se tratase de limpiar una hoja de una delicada planta o como si de terciopelo se tratase. Aquella chica se tomó 30 minutos, la cuales serían seguidas por una voz un tanto quebrantada ya que se seguía dormida diría "ugh~ ¿Qué hora es?" Decía mientras salía del baño que estaba teñido de un color rosa pastel para luego caminar unos metros hacia adelante, llegando a la sala de estar y con asombro miraria a su reloj de pared el cual marcaba que eran las 7:30 AM. "¡Necesito apurarme!" Los ojos como dos huevos estrellados se pusieron, mientras decía aquellas palabras de manera escandalosa puesto a que su escuela empezaba a las 8:00 AM.

Con la marcha puesta en quinta aquella chica iría sin pensarlo dos veces a su cuarto nuevamente y se pondría su uniforme escolar el cual era una camisa de color blanco con un moño rojo y una falda de color azul marino, para luego agarrar su ID de estudiante la cual habia puesto en su mesa de dormir, aquella tarjeta tendría un nombre Escrito en ella el cual era "Myra Imota" de 16 años. Mientras se preparaba Myra agarraria su mochila para luego proceder a correr, abriendo y cerrando la puerta de entrada de golpe por lo apurada que aquella niña estaba, y con paso redoblado correría por las calles de Sakira, Japón sin mirar a su alrededor y con una expresion de terror en su cara, ya que si llegaba tarde por decima vez en este año, iba a ser expulsada lo cual a ella no le hacia gracia. Los minutos pasaron y a Myra no le quedaban más fuerzas, pero seguia corriendo hasta que finalmente pudo ver un arco con letras inscritas las cuales marcarían la entrada a su escuela, seguido a sus laterales por un cercado negro y finalmente en el centro de este rectángulo tan inmenso, estaría el edifico de tres plantas el cual era la escuela.

Myra se acercaría a la entrada casi arrastrándose mientras veia que en aquel lugar estaria una de las compañeras de clase de myra"Te salvaste" decia una voz femenina de manera aliviada mientras daba unos pasos hacia adelante para encontrarse con Myra la cuál le respondería muy débilmente, recuperando su aliento "Si, Tienes razón Maria" la cual se ríe para luego ayudar a Myra y ambas entran a la escuela, puesto que justamente había sonado la campana indicando que era la hora de ingresar a los salones respectivos de cada estudiante.