la cita (parte 2)

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Me quite el saco lentamente y sigilosamente me acerque por detrás, podía escuchar las palabras idiota, patán, estúpido todas eran obviamente para mi.

Sin pensarlo dos veces le amarre el saco en la cintura

—¿Que demonios?—se quejó

Me plante enfrente de ella haciéndola rabiar más.

—hola, que me lanzaras el vino no fue muy buena idea

—¿Por qué me pusiste esto?— dijo mientras intentaba quitarse el saco

—creeme no te conviene hacer eso — le Sonreí y de pronto la cargue en mi espalda, raptándola. No se por que algo me dice que no tengo que dejarla ir así.

Procure que el saco la tapara bien de las piernas, no dejaría que nadie la viera.

—¡alto!¡no, idiota!¡bajame! ¡ Lee Donghae!¡estupido!

—deberías saber que soy un caballero— dije mientras la sujetaba más fuerte. Mis ojos comenzaron a arder, al parecer el vino logro entrar a ellos.

—¡no me salgas con tonterías!¡agh!

—deberías dejar de quejarte, vamos a pasar enfrente del restaurante

Seguí caminando con ella encima, ______ se quedo callada mientras que los comensales del restaurante nos veían entretenidos.

—¿ocupa ayuda señor?—dijo un joven

—si, ocupo que por favor abras la puerta de mi coche —señale el auto y le pase las llaves

—¿y la chica?

— yo me encargo de ella— Sonreí.

—Millonario idiota —escuche susurrar a ______

En cuanto el joven abrió la puerta, coloque a ______ en el asiento del copiloto.

— toma — le di un billete al joven — gracias por la ayuda — guiñe un ojo

Rápidamente tome asiento y cerré la puerta.

— yo me bajo

— no lo harás— detuve su mano y encendí el motor. ______ me fulminó con la mirada pero eso ahora no importaba.

Puse en marcha el auto. _____ no hablaba, la atmósfera era pesada, podía sentir sus deseos de decapitar por todo el auto.

— ¿por que lanzar vino? ¿no era mejor agua?

— fue lo primero que vi — cruzo sus brazos sobre su pecho — ¿Por que no invitar a alguien mas?

— porque eres tú la que me debe a mi. ¿no lo recuerdas?

—¡pero eso no incluye todo lo que dijo!— no pude evitar sonreír al verla exaltada— ¡no te burles!

— creo que lo malinterpretaste —de reojo la vi arquear una ceja — yo hablaba de mis conquistas normales, lo tuyo es solo trabajo — contesté, aunque lo que antes había dicho en el restaurante era mentira. — no recuerda lo que le dije antes..."a-bu-rri-da"

— lo odio — mascullo entre dientes

— ¿no sera que odia el hecho de que lo que dije antes no era por usted?— agregue mientras veía el camino

— ash...quiero bajarme — contesto con voz fría

Frene el coche haciendo caso a sus palabras. La miré.

______ abrió la puerta y salio furiosa. Baje del coche, camine hacia el lado del copiloto y me recargue en la puerta.

— ¿donde estamos? — preguntó

— no lo se

— tsk...me voy— miraba de un lado a otro tratando de orientarse.

— ¡______!

— ¡¿Que?! — se giro sobre los talones

— ese saco es mio — estire la mano. Ella miro a los lados y después su cintura, se quito el saco rápidamente y lo lanzo a mi mano— Gracias señorita

— ash, ¿Por que eres así?

— así nací— me encogí de hombros

_______ se dio la vuelta y trato de buscar el camino. Por su cara parecía no saber ni por donde empezar.

— me voy, espero llegue a su casa sana y salva— camine al asiento del piloto y encendí el motor.

— cambio de opinión — la voz de ______ era como de niña mimada mientras se colocaba en el asiento del copiloto. — solo quiero llegar a casa, esto no quiere decir que ya no estoy enojada.

— por supuesto — una gran sonrisa apareció en mi rostro. "Chica tonta"

El camino a su hogar fue muy callado, no hubo palabras, solo la sonrisa de mis labios. Me sentía cómodo de cierta manera, era como si nada malo hubiera pasado.

— llegamos

— Gracias — ______ bajo rapidamente.

— de nada — las palabras salieron lentamente de mi boca— creo que fue un buen pago.

— al parecer le agrado que lo bañara en vino — me sonrió.

— un poco, hubiera preferido agua. Nos vemos — me despedí

— ojala no — ya me estaba acostumbrando a su cara de ogro.

Me alejé del lugar pero por el retrovisor pude ver el vestido de _______ mecerse mientras entraba a su casa.

Cuando llegue a la casa de mi primo entre con cuidado, tratando de no hacer ruido.

De repente las luces se encendieron. Demonios. Leeteuk estaba cruzado de brazos.

— ¿Puedes explicar por que tomaste uno de mis trajes?...

— No...— trate de ocultar con mis brazos el traje

— ¿Que haz hecho? — se acerco a mí lentamente — Dejame ver

—no,no,no...no paso nada — una risa nerviosa escapo de mis labios.

— ¡¿Donghae que es esa mancha?! ¡¿Estas loco?!

— Si, bueno— rasque mi nuca — ¿Haz escuchado sobre los ataques de vinos asesino?

—Dong...Hae — su cara estaba roja

— ok, ok, lo puedo pagar

— ah...— suspiro — paga la tintorería, mocoso — subió a su cuarto pero se detuvo a medio trayecto — por cierto, mañana saldré de viaje a California. A partir de mañana seras mi suplente en la empresa.

— ¿Qué? — mis ojos se abrieron como platos

— Los vinos asesinos — se encogió de hombros mientras se reía.

— ¡¿Qué?!

Leeteuk camino con las manos en sus bolsillos hacia su habitación como si no hubiera dicho nada.

El infeliz se había ido a dormir.

NARRA ________

¿Porqué se comporta como un idiota? ¿Que no tiene modales? ¿Porqué no le lance agua?... ¡me cargo!, es una bestia sin cerebro.

Entre a la casa, estaba cansada y a la vez avergonzada.

Al final necesite de la ayuda de Donghae para regresar. De seguro el debe estarse riendo de mi ahora.

Suspire y me lance a la cama, era hora de descansar. Necesitaba olvidar lo de esa "cita" horroroza. Pero, por lo menos, logre pagar mi deuda.

Pero, ¿Porqué me enoje con sus palabras? Era claro que hablaba de una conquista y yo...yo solo era trabajo. Un pago. Me deje llevar, claro, como sí esa cosa se fuera fijar en mí.

— ah, Duerme ______ mañana sera otro día — musite antes de caer dormida.

sobredosisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora