Pasaban los días, seguíamos hablando eran muchas veces que te veía llorando te preguntaba pero igual, me ignorabas.
Estaba nervioso, regresé a casa y sabía que a las 5:00pm responderías.
Ninguna respuesta.
Te dejé tranquila.
Al siguiente día te vi llorando en el pasillo de la escuela.
Te fuiste.
Cuando saliste me golpeaste.
No te volví a hablar.
Escuchaba murmuros de todos.
Pensé que estabas "harta" de mi.
Pues repetía en mi mente.
"Mejor solo que mal acompañado".
Agarre mi celular y me puse mis pequeños audifonos.
Puse a Evanescence.
La música retumbaba en mi oído, mientras se me escapaba una lágrima.
Veía a todos partes y no estabas tu.
¿Como podía disculparme?**
No sabia que hacer, pensé que estabas molesta, harta y fastidiada sobre tanto hablar.
Pensé que no te gustaba que hable de cosas entre Tú y Yo.
Visite tu casa y tu madre abrió.
Le pregunte si estabas y dijo que no te había visto desde hace días, pero había dejado una nota en la habitación.
Eran palabras en pintura de labios negra.
Y rayadas con marcador rojo.
La dejé allí.
Me fui con pequeños pasos de tristeza
No quería comer, peinarme y menos ir a la escuela.
Mi vida.
Te necesito, te amo, te anhelo, te extraño.