Capítulo 1

1.1K 33 41
                                    

Hola a todos! Bueno, esta es mi primera historia. Es un AU sobre Merlín y Escanor; ambos tienen 19 años y están en su primer año de universidad. Aún no estoy totalmente segura sobre todo el desarrollo de la historia, pero espero les guste y me puedan dar ideas.


Capítulo 1:

El bullicio proveniente del salón sin profesor llenaba los oídos de Escanor en la última hora de clase. Era viernes, para hacerlo peor. Todos estaban ansiosos por largarse de una vez, en vez de estar en una clase de literatura. Escanor se encontraba sentado solo en uno de los escritorios dobles al frente del aula.

Gowhter, que usualmente se sentaba con él, había decidio ocupar el asiento vacío que había visto a la par de la chica nueva, Nadja. No lo culpaba, la verdad. Gowhter no había demostrado realmente interés por ninguna chica antes, pero ella tenía un aire distinto y lo intrigaba; además de que era muy bonita. No obstante, al pensar sobre alguien hermosa siempre le venía a la mente alguien más. Una chica alta, de cabello negro como la noche y unos ojos impresionantes.

Pronto se perdió en sus pensamientos como lo hacía usualmente. Escanor no la había visto entrar al salón aún. No es que le prestara mucha atención... de acuerdo, mentira. Sí que le prestaba atención a Merlín, pero ¿podían culparlo? A sus 19 años estaba que suspiraba cada que la veía pasar. Merlín era hermosa, es cierto. Más que ello, era divina; casi dolía verla ya que brillaba tanto como el sol, pero denle un poco de crédito, no le gustaba sólo por su apariencia.

Merlín era bastante seria. No estaba sola la mayoría del tiempo, pero rara vez la verías participar en las conversaciones que se desarrollaban a su alrededor. Se concentraba en sus clases y en dirigir el equipo de investigación del departamento de química, pero nada más. La mayoría de los chicos estaban enamorados de ella, pero Merlín no parecía interesada en prestarle atención ninguno de ellos. Bueno, no le prestaba atención a casi nadie, a no ser que fueras un libro o un experimento.

No era que fuera una completa nerd... sólo bastante enfocada y dedicada. Cumplía con sus tareas, participaba cuando nadie sabía la respuesta de alguna pregunta y siempre llegaba temprano a clases... excepto hoy al parecer.

No se saltaba sus clases, y las veces que se habían desarrollado debates en alguna materia, había expresado sus puntos con tal claridad y lógica que había ganado todos ellos. Así sin hacer esfuerzo alguno, todos parecían admirarla. Escanor sólo tenía a Gowhter, por lo que no podía más que admirar a Merlín. Ella lo tenía todo, apariencia, belleza, gracia, buenas calificaciones... Suspiró. Una vez su padre había intentado motivarlo a practicar deportes para que pudiera destacar en algo, como su hermano. Probó con béisbol. No salió bien. Luego basquetbol, después fútbol. Nada. Al final se dio por vencido y decidió que estaba bien con que continuara siendo buen estudiante. Y hablando de su padre, se preguntó si ya habría llegado a su destino.

Tendría que marcarle al celular después de clases. Su padre, Francisco Castellio, era el alcalde de la ciudad, y había tenido que salir por razones políticas a otra ciudad. No estaría de vuelta sino hasta el próximo viernes. Se había marchado al aeropuerto después de dejar a Escanor en la escuela. El chofer estaría en el aeropuerto y después tendría la semana libre (pobre hombre, ya necesitaba vacaciones) y el auto de Escanor estaba en el taller, ¿cómo rayos regresaría a casa si se lo entregaban hasta mañana?

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Merlín entró con paso apresurado al salón. El profesor le pisaba los talones. Buscó con la vista un lugar disponible, pero el único era el que estaba junto a Escanor. Trató de conservar la calma y una cara serena. Mantuvo la vista al frente cuando ella dejó la mochila dónde cargaba sus libros y otra que no estaba seguro lo que tenía, debajo de sus pies y se sentó en la silla que estaba al lado de él.

El sol en medio de la tormentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora