Sᴜ ᴜ́ʟᴛɪᴍᴀ sᴏɴʀɪsᴀ >Taekook<

11

–Taehyung ¿Escuchaste la canción? – Pregunto Yoongi quien se encontraba Desayunando junto a el –

–No, aún no la escuche – Levanto su vista del móvil y vio la mirada que le diría, aquella de reproche – La escuche cuando valla a visitarlo –

–¿Visitarlo? Te refieres...–Mirando al menor el cual movió la cabeza en forma afirmativa – ¿Estas seguro? –

–Si hyung, no fui a visitarlo desde que fue enterrado. Hací que lo escuchare allí – Realmente otra persona se le haría raro aquello pero para el seria como una despedida definitiva – Iré cuando termine de desayunar –

–¿Quieres que te llevé? –

–No hyung, puedo ir solo conozco la dirección – Respondió sonriendo – ahora que lo pienso ¿No debería estar trabajando? –

–Mis vacaciones comenzaron hoy, tendré que volver en unas ocho semanas –Respondió terminando lo que restaba del pan tostado – hací que tendrás que ver a esta hermosa persona en lo que resta de mi vacaciones –

–Como diga hyung –

Lo que restaba del desayuno se la pasaron hablando, ambos recogieron y limpiaron lo que utilizaron, Taehyung subió a su habitación para alistarse, realmente estaba nervioso, ya elegido su atuendo comenzó a desvestiste y de la nada la puerta fue abierta por su hermano.

–¡Santa madre! ¡Vistete! –Grito Yoongi el cual vio en bóxer a su hermano una mano fue a sus ojos cubriéndolo –

–¿¡Por que no tocas la puerta antes de entrar?! –

–Yo que iba a saber –Dijo ahora quitándose su mano de los ojos y miro el cuerpo de su hermano – Ahora entiendo por que Namjoon te viola con la mirada –

Taehyung ante eso, le lanzó una almohada que estaba a su alcancé pero antes de que esta fue hacia Yoongi y lo golpease, cerro la puerta y lo único que se escucho fue la risa del mayor alejándose.

Enojado, recordó lo que dijo anteriormente el mayor, sus mejillas comenzaron a calentarse –¿Que Namjoon hace que? – Pregunto para si mismo confundido –

Dejo aquel momento a un lado y ahora comenzó a vestirse sin antes trabar la puerta para evitar que su hyung entrara nuevamente.

Bajo las escales y despidiéndose de su hyung salio de la casa, camino tranquilamente por las extensas calles hasta llegar a la parada de autobús.

Espero allí, mirando sus anteriores huellas las cuales eran visibles por la nieve, el autobús paro enfrente de el y la puerta fue abierta, subió y pago su pasaje, no había casi nadie unas siete personas solo se encontraban allí.

Camino hasta los asientos del fondo, los cueles se hallaban vacíos y sin mas se sentó en uno de estos dirigió su mirada al exterior, las calles con pintadas de blanco a causa de la nieve, el día era nublado, miro ahora a unos niños quienes jugaban alegremente en la nieve, tirándose pequeñas bolas creadas por ellos mismo, otros haciendo hombres de nieve.

Sonrió melancólico, a su menor le encantaba la nieve, el invierno era su Estación favorita le encantaba sentir el clima frío, el lo odiaba pero solo por el comenzó a amarlo.

Eran cosas raras según el cuando era niño, del como odiar un objeto hasta que alguien llegase y lo hacia cambiar de opinión.

Antes odiaba el té de manzanilla ahora lo amaba, antes le parecía aburrido explorar y conocer cosas nuevas, pero ahora solo le parecía intrigante y entrenido, sinceramente el menor llego para dar vuelta la vida de el.

Ya fuera del autobús, el viento frió golpeo suavemente su rostro, haciendo que sus cabellos se alborotaran ligeramente, camino hasta la entrada de aquel establecimiento, su aspecto lucia sombrío con melancolía, le daba una sensación de tristeza.