♡ 𝙏 𝙃 𝙄 𝙍 𝘿 𝙎 𝙃 𝙊 𝙊 𝙏 ♡

1.6K 156 49
                                    

Continuación del anterior capítulo...

Tic Tac, Tic Tac. Aún no llegabas y comenzaba a desesperarme, ya había dado una vuelta por toda tu casa, había revisado tu ropa, mire debajo de tu cama, fui por un nuevo vidrio y cambie el que tenías roto. ¡Todo eso y aún no llegabas!

Mande el último mensaje "Te quiero" ¿En qué estaba pensando? Ni idea, pero sentí un poco agradable cuando lo mandé.

Sería una noche muy especial para mí, mañana regresaría a casa,  a los barrios bajos, y no lo volvería a ver nunca más  -a menos que regresará con mi hermano Ucrania- pero peleaba mucho con él, y no era muy lindo estar aquí.

—Al fin haz llegado—abrió la puerta y quedó atónito ante la sorpresa que le había dado, me levanté de la cama y tomé su mano. —Sígueme, bebé— lo encaminé hasta la silla que había subido y lo senté ahí.

Rusi...—le di un casto beso en sus labios e hice un ademán para que guardará silencio, saque mi móvil y puse música que anteriormente había descargado. Algo que no hacía, sin embargo sería la excepción.

Tenía pensado tirarlo en la cama, desvestirlo y hacerlo mío, pero no, no aún.

Tomé la botella de tequila que había en la mesita de noche, a un costado de su cama, y la abrí, me subí a su cama y quedé frente a él. —Abre tu boca— ordené e hizo caso, aproveché para meter una parte de mi pie en su boca y abrí la botella, dejando caer el líquido sobre mi pierna, deslizándose hasta descender en su boca y ser degustado por él.

« —Es que eres tan perfecto...—»

Seguí dejando caer el frío líquido hasta su boca, y el lo bebió todo, lamió un poco mi pie y lo separé. —Tan obediente, bebé...—baje de un brincó y lo tome del mentón, obligandolo a mirarme, sonreí y lo bese lentamente, cómo nunca antes había hecho.

Deslicé mi mano por su espalda y lo puse de pie sin cortar aún el beso, cuando nos quedamos sin aliento, rápidamente quite su camisa y sus pantalones junto con su ropa interior. Lo levanté y el se aferró a mi cuerpo, quedando colgado de mi, con sus brazos sobre mi cuello, agarrándose fuertemente.

Sentí mi miembro despertar cada vez más, me dolía un poco, así que baje mi bóxer y rompí el suyo con mis manos, tocando un poco sus testículos.

El gimió un poco alto, sus pezones duros estaban chocando contra mi pecho, seguí jugando con él y lo masturbe un poco. Para después volver a profanar su cálida entrada.

Me araño la espalda y yo moví mis caderas con ímpetu, baje un poco mi ritmo y comencé a darle estocadas lentas, sin tanta profundidad.

—Rusia...ah —me abrazó y sentí... Sentí cálido.

Un calorcito agradable me abrazo y me obligó a responder de la misma forma, lo lancé a la cama y me puse a horcajadas de él, seguí embistiendolo de forma lenta. Unimos nuestras manos y las levanté un poco, su expresión era una imagen hermosa.

Sus ojos cerrados, su cabeza un poco inclinada hacia la izquierda, boca semi-abierta que dejaba escapar unos cuantos gemidos y mi nombre... Pelo alborotado...cuello descubierto...no, no podía más.

Me vine dentro de él y apreté su miembro para que no se viniese también. Salí de él y lo mire neutral, sin ninguna expresión.

« —No soy joto...no soy joto...— »

Me incliné en su parte baja y metí su pene a mi boca, un sabor un poco salado invadió mis papilas gustativas, pero no me importo, le daría el gusto.

Comencé a mover mi cabeza de arriba hacia abajo de forma rápida, su cuerpo se tensaba y de vez en cuando arqueaba su espalda.

—Rusia... sí...ah—tan obsceno y eso me encantaba.

México ya estaba delirando del placer, había una que otra lágrima escurriendo por sus rojas mejillas y sus manos estaban tomando de mi pelo.

Supe que se iba a venir cuando trato de separarme y se movió incómodo, apreté sus manos y las alejé de mi, gruñendo un poco. 

—¡Ahhh! —México grito de placer cuándo sintió que su punta choco contra mi garganta, echo su cabeza hacia atrás y tocó sus pezones, jugando con ellos un poco.

Era una maldita imagen morbosa que me llevaría al infierno, pero estaba conforme con el castigo que recibiría. México sintió algo sobre su abdomen al sentir que ya no podía más —Mierda...lo oí murmurar y dejo salir toda su esencia sobre mi boca, yo tragué todo sin dejar algún rastro de semen en su punta o en mis labios. Cuando me aseguré de que así no fuera me puse de pie y me tumbe a su lado, cayendo cansados sobre la enorme cama matrimonial. 

—Eres bueno en estodijo— no puedo creer que perdí mi virginidad con un criminal. 

—Ni yo con un pijo de los barrios altosreí y lo abracé atrayendolo un poco a mi cuerpo—¿tu...quieres a..?

—¿A Canadá?hice un sonido de aprobación— pues se suponía que sí...pero...me acosté con otro chico soltó con un tono algo deprimido y apoyo su cabeza contra mi pecho. 

—Solo fue una aventura, cariñotoque su mejilla y luego le di un corto beso sobre la comisura de sus belfos—No te sientas mal. 

—¿Y si se entera?volvió a darme una mirada preocupada y le sonreí para intentar tranquilizarlo.

—Te prometo que no lo hará. aseguré y cerré mis ojos— Ahora duerme, mañana tienes que levantarte temprano para ducharte e irte a trabajar. 

—Rusia...me ignoró— ¿soy importante para ti?

¿Importante? Umm, supongo que sí. Siempre me haces tener una erección cuando pasas por la casa de Ucrania, deduzco que sí. 

—Muy importante. Siempre que despierto o te veo pasar, tengo una erección gracias a ti, eso es como...ser súper importante para mi dije y rió bajito.

Wooow que importante...¿Y me quieres? volvió a preguntar, con tono un poco somnoliento. 

—Te quiero. sonreí.

Se escuchó una risita nasal por toda la habitación y se acomodo mejor sobre mi pecho —Méxicole llame tranquiloAborreceme porque no volveré.

Y caí rendido a los brazos de morfeo, una noche tan única y especial que recordaría para toda mi vida. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
GÁNSTER 🔫 RusMex THREESHOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora