Gummy! BNHA x Lectora

01

(T/n), 5 años de edad.
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"Entonces como te decía, puedo crear chicle, ¿Quieres un poco?" Preguntó la pequeña (C/c) a su nuevo amigo, un niño unos cuantos años mayor que ella, un poco raro y tímido, pero buena compañía.

El peliazul vió como la niña creaba una bola de color rosa y se la ofrecía para tomarla, con un poco de desconfianza la agarró para después llevarla a su boca y masticar el dulce sabor fresa.

"¿Te gusta ese sabor? Sabes puedo crear más si ese no te gusta puede ser menta, naranja, uva, hierbabuena, ma-"

"Este está bien" Murmuró el chico solo para que se quedará satisfecha y callada. Logrando que la pequeña asintiera enérgicamente con una sonrisa plamada en su cara, soltando una pequeña risa el chico continuó masticando el dulce.

"Tin tin tin"

"¡Ohh! ¡Son los helados! Ven Tomu-chan, mi madre me dió dinero suficiente para comprar helados para los dos. ¿Qué sabor de helado es tu favorito? El mío es de (H/f)" Antes de que pudiera negarse, la pequeña había tomado su mano para correr hacía el carrito de manjares de dioses como los llamaba (T/n).

Asustado, trato de retirar su mano del agarré de la niña, para llevarse la sorpresa de que no sucedió nada. No se estaba desintegrando, ningún efecto, era como si ni siquiera tuviera un quirk.

Sintió felicidad. Podía tocarla con sus cinco dedos y no le sucedía nada.

"¿Estás bien Tomu-chan? Te ves confundido" ... "Entiendo si no quieres helado, ¿Qué es lo que te gusta? ¿Las galletas, las gomitas, el chocolate?" Dios mío esta chica si que habla, pero eso no era lo importante ahora mismo, lo importante era por que no hacía efecto su quirk.

"¿Puedo darte un abrazo?" Susurró con timidez el chico mientras jugueteaba con sus pulgares.

"¿Un abrazo? ¡Claro! Me encanta darme abrazos con mi familia, en especial con mis hermanos, ellos dicen que mis abrazos son cálidos y con amor" Comentó con felicidad, mientras abría sus pequeños y delgados brazos para que el peliazul se envolviera con ellos.

No paso mucho tiempo para que el chico se lanzará a ella y fuera recibido por una sensación nueva ¿Amabilidad? ¿Felicidad? ¿Aceptación? ¿Amor?. No lo entendía, era confuso, extraño, algo completamente nuevo para él.

"Bueno, se hace tarde, tengo que regresar a casa, ¡Hoy le contaré a mi madre que hice un nuevo amigo llamado Tomu-chan, y adora los abrazos!" Gritó con felicidad mientras rompía el abrazo y saltaba con alegría.

El chico solo se mantuvo callado, extrañando un poco sus calidez. Después dejó salir una risa, que extraña niña.

"Por cierto, te regalo estos chicles, en caso de que tengas hambre" Le extendió unos mientras seguía envolviendo otros en pequeñas envolturas de colores.

"¿Envolturas?" Preguntó con curiosidad Tomura mientras los inspeccionaba con la mirada.

"¡Sip! Izu-chan y Katsu-chan siempre me piden entonces decidí comprar envolturas para que sea más fácil conservarlos" Explicó cuando terminó de envolver el último. "Incluso tienen frases en ellas, ¡Mira!" Leyó una que decía 'eres el mejor'.

"¿Quieres una personalizada? Espera unos segundos" Sacó un papel de color azul y un plumón de su mochila. El peliazul observó con diversión como sacaba su lengua y hacía muecas al escribir, después de unos segundos terminó acercándole el chicle ya envuelto.