Victoria~
Diario personal de Victoria¡Demonios! ¡Al fin algo bueno que valga la pena escribir en mi diario! O al menos, divertido de leer.¿He escrito de Raquel antes? Me parece que no, el caso es que ella es buena amiga mía (aunque no nos parezcamos en nada) , a decir verdad, es muy guapa, pero es algo... ¿Cómo decirlo de manera que no suene ofensivo? Ah, da igual, de todos modos ella jamás leerá mi diario. A lo que me refería es que ella es una perra (pero con cariño ♡).
A lo que voy, parece ser que, gracias a uno de los tantos chicos (o señores) con los que se ha acostado, ha resultado "embarazada".
Me escribió un mensaje de texto mientras mis amigos y yo comíamos pizza. Ella no había llegado por alguna razón (ya imaginarás por qué). El mensaje decía algo sobre su menstruación.
Bueno, en algo estoy de acuerdo con ella, resulta ser que, después de tanto tiempo que llevamos conociéndonos (unos 5 o 6 años), se que es muy... ¿puntual? En realidad no se si esa sea la palabra, da igual. El caso es que ella suele tener su periodo cierto día del mes (el 26, osea hoy) y no es común que su día cambie.
No es que me importe mucho que ella salga o no embarazada, al fin y al cabo se lo he advertido varias veces pero es una testaruda. Tal vez no sea tan buena amiga después de todo por no preocuparme ahora...
Ayer fuí a su casa después de que termináramos de comer. Obviamente no dije nada respecto a lo que contenía el mensaje frente a los demás. Me limité a un "le duele el estómago".
Toqué el timbre de su puerta, ella abrió a los segundos —podría jurar que ella llevaba tiempo esperándome—, me besó la mejilla y me sujetó la muñeca jalándome hacia dentro de su casa.
—Tardaste más de lo que esperaba— me reprochó
—Bueno, tenía que comer, ¿sabes?— Le di unas palmadas en el hombro— además no es mi culpa que te acuestes con cualquier perro que se te cruce enfrente. Dime, ¿ya sientes pataditas en el vientre?
Al parecer no le gustó mi chiste pues se sonrojó y me dió un puñetazo en el hombro.
—Para tu información, no estoy embarazada. Tuve mi periodo en la mañana.— Estalló en carcajadas.
Hija de puta.
—¡¿Entonces para que carajos hiciste que viniera?!— Mi rostro y me actitud no se veían tan amigables.
—Necesitaba que me dieras una opinión urgente. Verás, hoy en la salida de la escuela, Robert me pidió que fuera su novia. Lo quiero y todo pero pues, en realidad, no es alguien que me gustaría tener como...
Estaba harta. Me hizo ir hasta allá para escuchar sus problemas de adolescente tonta. Abrí la puerta y la azoté tras de mí de un golpe sin dejarla terminar de hablar.
Llegué a mi casa y lo primero que hice fue darme una ducha. Al terminar quise mandarle un mensaje a Ailon, mi mejor amigo, para contarle mi molesta pero extraña anécdota de hoy, pero. ¡oh, sorpresa! Mi celular no estaba. No pude dejárlo en casa de Raquel pues nunca lo saqué mientras estuve ahí así que probablemente lo había dejado en la pizzería cuando fui a comer con los chicos.
Encendí mi laptop y me conecté a Facebook, tal vez alguien del grupo de hace rato lo hubiera visto y lo haya guardado. ¡Elementary, my dear Watson! Tenía un mensaje de Len en el que decía que el lo halló en la mesa en la que habíamos comido. Uff, que alivio.
Perder mi celular igual fue una iniciativa para seguir escribiendo, ya no tenía con quien chatear en las noches, al menos no tan cómodamente como lo haría desde mi celular. Así que agarré mi diario y me puse a escribir lo que había pasado hoy, que como dije al principio, me parecía divertido de escribir y de leer.
Espero que sigan surgiendo cosas interesantes para seguir escribiendo.