Lo primero que hizo YoonGi al conocer a HoSeok fue golpearle las pelotas. HoSeok se lo merecía y si lo veías desde el punto de vista de YoonGi, hasta había pedido ser golpeado.
✓Hopega/Sope
✓Inspirado en el best Seller "My Favourity Mistake"
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Media hora después HoSeok entro al cuarto, cubierto tan solo por una toalla mínima atada a su cintura, su perfecta y muy trabajada cintura de chico fitness.
Entro pasando frente a mi como si no fuera la gran cosa, sin intención alguna mis ojos viajaron a sus cabellos castaños que estaban empapados y destilaban gotitas de agua que caían sobre su rostro y cuello, deslizándose hacia su pecho y espalda.
La espalda de HoSeok era ancha en los hombros y estrecha en las caderas, un hermoso triángulo invertido, y ¿Como se hacía para tener esos brazos?. Mis ojos vagaron por su abdomen plano con 0 grasas y su línea alba perfectamente tallada sobre su cuerpo, estaba seguro que podía dibujar cada uno de sus músculos con mis dedos si..
"¿Bonita vista?" levante la mirada de los pectorales de HoSeok, entrecerre los ojos intentando adivinar sin parecer idiota que estaba diciéndome, ya que estaba muy entretenido antes como para escucharle.
"¿Uhum?" pregunté confundido a lo que HoSeok soltó una sonora carcajada rásposa
"Veo que te he dejado sin palabras" se regodeo, con una de sus mano tomo el nudo de la toalla "puedo quitarla para que me examines más a fondo" dijo con una sonrisa engreída que mostraba un poco sus estúpidos dientes de marfil.
El muy maldito se estaba riendo de mí.
Sentí el calor y la vergüenza alojarse en mis mejillas y aparte la mirada con rapidez, levantándome de su cama, caminé dando pasos molestos hasta la puerta
"I-Idiota" balbucee sin orgullo alguno y azote la puerta, la risa escandalosa de HoSeok cesó minutos después, cuando ya estaba en el sofá intentando ahogarme con un cojín, merecía morir.
¡En que estaba pensado! ¡¿Que está mal contigo Min YoonGi?!
HoSeok no es comida, no puedes mirarlo con si fuera una manzana con caramelo. Es más, si HoSeok fuera comida seguro sería un brócoli saludable, no dulce, nunca dulce.
Minutos después una mano en mi hombro hizo que saltará fuera del sofá, mi cuerpo tenzandose como una flecha por el contactó inesperado, HoSeok estaba frente a mí, ahora con sus manos en los bolsillos de sus pantalones como si no hubiera notado mi reacción que para muchos otros sería exagerada.
Y me di cuenta entonces, que aunque no quisiera estar más con HoSeok debía admitir que eso me gustaba de el, que nunca me preguntara porque actuaba o reaccionaba así, HoSeok nunca me había presionado a hablar, aparte la mirada de su rostro y junte las manos en la espalda mientras veía como HoSeok se movía hacia la puerta y cogía algo de la mesita.
"¿Nos vamos?" pregunto abriendo la puerta y dándome una mirada rápida, no asentí pero caminé en su dirección.
Una vez asegurada la puerta, nos montamos en el ascensor en un fortuito silencio, lo único que rompía la pasible atmósfera era el traqueteo que las viejas vigas del ascensor y el palpitar de mi corazón.
