Las muchachas estaban más que partías sobre esa noticia, por otro lado yo solamente rodaba los ojos y comía de lo que quedaba de mi hamburguesa.
¿De todos los maricos que hay en el SM, tiene que ir esa bruja?
Ryujang bebe un poco de su refresco antes de abrir la jeta - ¿Ellos saben de esa sesión?
Soocheng asiente, mientras sigue hartandose de su carne, la familiaridad que teníamos con este jevo era brutal. Era como otra más de nosotras pero con webo.
Julianie y yo ya estabamos acostumbradas a socializar con esa clase de famosos, la razón por la cuál ella y yo no estabamos muy sorprendidas que digamos, bueno, la bicha anda con el excite y la sonrisita y risa mongólica es por el lider de esa banda dónde esta el marico feo de Oh Sehun.
En cambio yo, no ando alegre ni triste por los otros chamos que irán a la vaina, ya los había visto en persona pero nunca nos atreviamos en inciar una conversación, sólo unas miraditas como de "Coño, este es tal chamo" "Ah, pero mira este es fulano" o cosas así, pero nada de cruzar palabras.
Pasa una hora y nos fuimos del restaurante, ya nos encontrabamos vía al dormitorio de todas.
- Pasaré mañana por ustedes. Esten listas a las diez - Soltó Soocheng luego de un bostezo pero con una pequeña sonrisa en él. Todas asentimos mientras bajabamos de la minivan mientras nos despedíamos.
- Tienes que dormir, oite - Hablé con seriedad pero al momento le sonreí igual de cansada dandole un beso en el cachete provocando que el mayor asintiera un poco perplejo.
Rápido me bajé de la van para no quitarle más tienpo de descanso al chamo, caminé hasta la entrada de nuestro departamento abriendo la puerta y a la vez escuchando como Soo arrancaba la camioneta luego de ver que había entrado.
Una vez en el departamento que no hace más de tres días que nos habían mudado, consistía de tan sólo tres cuartos, una cocina y un baño, todas vamos a nuestros cuartos, mi roonmate era Devon ya que Kishi le había pedido mucho antes a mi hermana que fueran compañeritas de cuarto. Así que me tocó dormir con mi segunda persona favorita en esta vaina.
Mientras que nosotras ordenabamos un poco el cuarto, el resto también lo hacía en los suyos más ordenar la cocina, esta mañana pusimos el departamento como un culo por habernos despartado tan tarde.
Yo andaba con una sonrisita gafa mientras me sacaba la blusa que traía puesta para ponerme una sudadera que me duplicaba la talla. Compraba sudaderas extra grandes para usarlas se pijama, eran comodos, como unas batas con bolsillos y manga largas con capucha.
Noto que Devon me observa atenta desde su cama ya ordenada.
- Juliam..- Me llama cuando finalizo mi cambiadera. Me imagino que debe de preguntarme del porque mi sonrisa. - ¿Qué sentiste cuando estuviste en el escenario? - Murmuró aún mirándome.
- Coño...sentí de todo, andaba con miedo pero al fin y al cabo los nervios se fueron cuando subí las escaleras con Seayoung - Encogí mis hombros, causandole una risa a Devon. - Aún ando con miedo de lo que dirán de lo que paso hoy, pero me siento fina, en banda. Hemos trabajado duro en tan poco tiempo y gracias a eso estamos aquí.
Devon me ve con un brillito en sus ojos y asiente lentamente.
Era una cosita hermosa.
Por otro lado yo tomo mi teléfono de la cama. Sonreí cuando entré a uno de los grupos de Kakao con unos mensajes que me habían enviado.
Puse a reproducir las notas y río al escuchar como las bichas locas exclamaban con emoción epiletica.
- Juju~ - Devon me llama de forma melosa, fruncí el ceño volteandola a ver. Entre todas habíamos acordado en llamarnos por nuestros nombres.
Y yo sabía cuando esta carajita me llamaba de esa manera, quería algo.
- No - Me apuro en decir, sólo para echarle vaina.
