Se que dejaste de palpar el cielo con las manos.
Que aquellas curvas voluptuosas con proporciones perfectas se han quedado atrás.
Se que ahora palpas barro con tus manos
tierra rasposa y seca que llena un saco amorfo.
Que los labios, sonrisas perfectas atados a talentos inusuales
se han quedado atrás...
Te pido perdon de antemano porque no tengo nada que deslumbre.
Llevo un mar adentro que se desborda por el canal de mis mejillas constantemente
Hay un manojo de todo y nada.
No soy deslumbrantemente inteligente.
El orden no es lo mio pero trato de lograrlo
Se que mi cuerpo no es nada parecido al de las ninfas
Que soy un mortal con mucha mundanidad.
Hablaré de cosas que seguramente no te importan
y así será porque me gusta relatar.
Seguramente te haga enojar muchas veces
seguramente no sea lo mejor
pero todo eso ya lo se.
se que dentro de mí no hay nada realmente especial
pero te puedo cobijar de los náufragos y terremotos en el fondo de mi corazón
donde las tormentas no llegan
donde mis mejores historias quedan guardadas.
Es pequeño y algo desordenado pero lo he estado organizando y decorando para ti.
Y no te preocupes por la marea
a veces se desborda y me ahoga entre mis dudas.
Perdona, se que es molesto
pero en las noches me abrazo a mi misma y me mejoro.
No estoy acostumbrada a compartir eso que siento
pero me conociste sin mis corazas
y ahora no quiero colocarlas, no contigo.
Por eso perdona, se que no es ameno un caos como yo
siempre me han pedido compostura pero la pierdo.
